Para muchas personas es especialmente complicado llegar a fin de mes. Factores como los altos precios de los alquileres, la fuerte subida del euríbor en los últimos meses, o el incremento del precio de los productos de alimentación a consecuencia de la inflación, provocan que el ahorro de las familias españolas se esté consumiendo poco a poco.
En esta situación, llegar a estar en número rojos en el banco no es algo tan infrecuente. Quedarse sin dinero en la cuenta bancaria no solo implica no tener recursos para cubrir las necesidades más básicas, sino que genera una comisión que habrá que pagar al banco en cuanto lleguen los fondos.
La comisión por descubierto
Cuando una cuenta bancaria se queda sin dinero, se dice comúnmente que está en números rojos.
En el lenguaje bancario se habla de la existencia de un descubierto cuando la entidad adelanta saldo a su cliente a pesar de que este no tiene los fondos necesarios.
Por ejemplo, si llega un recibo de la luz y en la cuenta no hay dinero suficiente para pagarlo, el banco puede pagar igualmente ese recibo. Es como si estuviera haciendo un préstamo a su cliente.
Como es lógico, ese cliente deberá devolver después la cantidad que el banco ha pagado por el recibo y, además, la comisión por descubierto y los correspondientes intereses.
Importe de la comisión por descubierto y otros gastos
La comisión por descubierto es totalmente legal, pero la Ley 16/2011, se encargó de limitarla. En base a esta normativa, ni la comisión ni los intereses de demora pueden superar una tasa anual equivalente (TAE) que sea superior a 2,5 veces el interés legal del dinero.
La comisión por estar en números rojos se calcula sobre el saldo deudor. A día de hoy, la mayoría de las entidades aplican un 4,5% sobre el mismo con un mínimo de 15 euros.
En base al número de días que la cuenta haya estado en negativo, el banco puede aplicar intereses de demora, que en la actualidad están en torno al 7,50% TAE. De esta forma, cuanto más tarde el cliente en regularizar su situación, más va a tener que pagar.
Comisión por reclamación de posiciones deudoras
Si el cliente no abona a tiempo lo que le debe al banco por haber tenido su cuenta en negativo, este puede aplicar una comisión por reclamación de posiciones deudoras.
A través de ella se restituyen al banco los costes en los que ha tenido que incurrir para conseguir el recobro. La cuantía más elevada que se exige como comisión de este tipo está en torno a los 50 euros.
Comisiones por descubierto de los principales bancos
4,5% es la comisión por descubierto más extendida. Es la que aplican entidades como Abanca, Banco Sabadell, Bankinter, BBVA, Deutsche Bank o Cajasur entre otras. Algunas sin mínimo y otras con un mínimo que oscila entre los 15 y los 18 euros.
También existen entidades que no cobran comisión por descubierto, como es el caso de Evo Banco y de Pibank, aunque sí cobran intereses por la cantidad adelantada a sus clientes.
En el caso de ING, el banco neerlandés no cobra comisión por descubierto si el cliente regulariza su situación en dos días. A partir de ese momento aplica un coste fijo de 3,99 euros, sin cobrar intereses.
Limitaciones del Banco de España
Cobrar comisiones por descubierto es legal, pero el Banco de España ha establecido una serie de límites para evitar los abusos.
Por ejemplo, no se puede aplicar la comisión por descubierto bancario si la cuenta se ha quedado en números rojos a consecuencia del cobro de otra comisión aplicada por la propia entidad bancaria. Tampoco si el descubierto trae causa de la ejecución de un embargo bancario.