50.298 millones de euros es lo que lograron ahorrar las familias españolas en su conjunto en el período que va desde abril hasta junio. Cifra que supone un 53% más en comparación interanual.
Las ligeras bajadas que vino experimentando la inflación durante el segundo trimestre del año permitieron que las familias recuperaran un poco de su poder adquisitivo. Y, ante la situación de inestabilidad, muchas de ellas decidieron destinar ese dinero que ya no tenían que gastar en consumir, al ahorro.
Esto ha permitido que la cifra de ahorro de los hogares españoles crezca un 20% entre abril y junio, alcanzando el nivel más alto en los dos últimos años.
A pesar de que el gasto en consumo ha crecido porque los precios no han bajado de forma significativa, una gran parte de los hogares españoles han logrado gastar menos de lo que ingresan.
Evolución del gasto en consumo e inversión
Para el período de abril a junio, el gasto en consumo final de los hogares españoles se cifra en 200.740 millones de euros. Lo cual supone un incremento del 5,2% con respecto al mismo período del año pasado.
Por lo que se refiere a las inversiones, los hogares españoles han invertido durante el segundo trimestre del año 15.295 millones de euros. Cifra que rebasa los 14.893 millones de euros del período de abril a junio de 2022. En total, las inversiones suponen un 6,3% de la renta bruta disponible de los hogares.
Si las familias han aumentado su gasto, pero también su capacidad de ahorro e inversión, se explica sobre todo por los aumentos salariales que se han venido aplicando en los últimos meses.
Con más renta disponible, los hogares aumentan el dinero que destinan a consumo, pero también actúan con precaución e invierten para tener más recursos en el futuro. En total, la renta disponible aumentó un 12,2% durante el segundo trimestre, en comparación interanual.
Otra consecuencia del incremento del ahorro y la renta disponible es el crecimiento del PIB, que en el segundo trimestre aumentó un 0,5%. Impulsado principalmente por la demanda interna.
En este período, la demanda interna de consumo e inversión aportó un punto al PIB, mientras que la bajada de las exportaciones e importaciones restaron 0,5 puntos, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Mayor capacidad de autofinanciación
Al contar con mayor capacidad económica, los hogares han podido financiar con su ahorro las inversiones que han tenido que realizar a lo largo del segundo trimestre.
Como resultado, las administraciones públicas acudieron más a la financiación de entidades bancarias durante el período de abril a junio, de lo que lo hicieron los hogares y las empresas.
La mayor capacidad económica disponible, unida a la fuerte subida de los tipos de interés que ha venido aplicando el Banco Central Europeo (BCE) en los últimos meses, está llevando a familias y empresas a recurrir más a la financiación a través de fondos propios para cubrir sus necesidades.
Crece la renta nacional
En el segundo trimestre de 2023 la renta nacional bruta ha llegado a los 361.528 millones de euros. Esto supone un incremento del 7% en comparación interanual. Por su parte, la renta nacional disponible se dató en 357.797 millones de euros, lo que es un 7,3% más que en el año anterior.
La mayor remuneración percibida por los asalariados, así como el aumento del excedente de explotación de las unidades productivas, explican este incremento.
Sin embargo, se aprecia un saldo negativo en rentas de la propiedad, con un resultado final de -4.534 millones de euros, que contrastan con los 1.011 millones de euros del segundo trimestre del año pasado.