El ICC, Índice de Confianza del Consumidor, es un ratio que permite hacer previsiones sobre la intención de gasto que tienen los consumidores en función de cómo perciben ellos la evolución de la economía.
Cuando el ICC es alto, eso quiere decir que la economía está en un buen momento y los consumidores se muestran más dispuestos a gastar. Por el contrario, cuando el índice baja, la consecuencia es una mayor contención en el gasto en consumo y en ocio.
En España, el ICC se elabora de manera mensual por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) a partir de una serie de encuestas realizadas a consumidores, en las que se les interroga sobre sus previsiones de ingresos, sus planes de consumo y lo que esperan de la evolución de la economía. Factores como la inflación, los tipos de interés, o la estabilidad política, pueden influir a la hora de que el índice de confianza suba o baje.
Fuerte bajada del ICC en septiembre
Es habitual que el índice de confianza de los consumidores suba durante el verano, empujado por el gasto que se planea hacer durante las vacaciones.
En septiembre se suele retomar la senda de la moderación, pero en esta ocasión los datos reflejan un importante desplome en el ICC del noveno mes del año.
Tras cuatro meses consecutivos de ascensos en el índice de confianza de los consumidores, en septiembre ha caído hasta los 77,2 puntos, lo que supone 17,2 puntos menos que en agosto.
Este retroceso es el tercero mayor registrado dentro de la serie histórica, situándose por detrás de los registrados en marzo de 2020 y en marzo de 2022.
Preocupa la situación económica actual
Uno de los factores que más ha hecho descender el ICC es la opinión que tienen los consumidores sobre la situación económica actual.
La valoración de este factor cayó en septiembre 27 puntos con respecto al mes previo.
El indicador de expectativas económicas con respecto a la evolución de la economía en el futuro más inmediato, se contrajo en septiembre 19,6 puntos con respecto a agosto.
También ha crecido la preocupación sobre la situación económica de los hogares. El índice de confianza en la situación de los hogares decreció 10,7 puntos en septiembre, y las expectativas sobre las economías domésticas bajaron un 9,4 intermensual.
Subida de la inflación y bajada del ICC
Los altos niveles de inflación tienen una incidencia directa en el índice de confianza de los consumidores. Cuanto mayor es el IPC, menos confianza tienen los consumidores en el mercado.
La inflación suma dos meses de repuntes y se situó en un 3,2% en septiembre, ocho décimas más que en agosto. Con los precios de nuevo en aumento, las expectativas de ahorro de los hogares se reducen 9,7 puntos con respecto al mes de julio.
A pesar de ello, en términos interanuales las cifras del ICC son positivas. Desde septiembre de 2022, el índice de confianza de los consumidores se ha incrementado en 21,5 puntos, lo que en términos porcentuales supone un incremento del 38,5% con respecto al mismo período del año pasado.
Situación similar en Alemania
Otros países de la Unión Europea también están experimentando un fenómeno similar, como ocurre en Alemania.
En su caso, el ICC de septiembre refleja un importante aumento en la propensión a ahorrar que ha provocado importantes caídas en las expectativas de consumo.
Con una inflación del 6,1% y la constante subida del precio de los alimentos básicos, el poder adquisitivo de los alemanas está a la baja, y estos prefieren contener el gasto.
Estos datos llevan a los expertos a vaticinar una ligera contracción del PIB alemán (0,4%) a lo largo de este año.