La economía de España continúa mostrando signos de fortaleza en medio de un período de estancamiento generalizado en la eurozona. Según los últimos datos preliminares revelados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el Producto Interior Bruto (PIB) de España experimentó un notable crecimiento en el último trimestre de 2023, aumentando un 0,6%.
Este incremento es significativo, siendo dos décimas superior al del trimestre previo, y se ha visto impulsado en gran medida por un sólido mercado laboral que ha fomentado el consumo privado y la resistencia de las exportaciones en un panorama internacional marcado por la incertidumbre.
Este desempeño positivo ha llevado a que la economía española cerrase el año con un crecimiento anual del 2,5%. Este dato es particularmente notable, ya que supone el tercer año consecutivo de crecimiento desde la caída histórica ocasionada por la COVID-19 en 2020. Sin embargo, el crecimiento de 2023 es menor en comparación con los años anteriores, evidenciando una ralentización global debido a la escalada de precios y las medidas implementadas para su control. A modo de comparación, el PIB creció un 5,8% en 2022 y un 6,4% en 2021.
Este crecimiento anual se ha apoyado principalmente en la demanda nacional, incluyendo el consumo y la inversión, la cual contribuyó con 1,7 puntos al crecimiento total del PIB. La demanda externa, compuesta por las exportaciones e importaciones, aportó 0,8 puntos, aunque esta contribución ha sido menor en comparación con el año anterior.
Sorprendentemente, la economía española ha superado las proyecciones de los principales organismos internacionales, los cuales estimaban un crecimiento en torno al 2% para 2023. Este rendimiento incluso ha superado las expectativas del Ministerio de Economía de España, que había proyectado un crecimiento del 2,4% para el año.
Con la confirmación final de estos datos por parte del INE, que se espera para finales de marzo, España podría posicionarse como la economía de mayor crecimiento en 2023 entre los grandes países de la eurozona. Este dato es especialmente relevante en un contexto donde la eurozona en su conjunto ha experimentado una contracción, con una caída del 0,1% en el PIB en el tercer trimestre y naciones clave como Alemania y Francia cerca de la recesión técnica o el estancamiento.
El cuarto trimestre de 2023 ha sido particularmente fuerte para la economía española, con el PIB alcanzando su mayor tasa de crecimiento anual (2%) en comparación con el mismo periodo de 2022 y siendo el más alto desde la primavera de 2022 (2,5%).
«Esto es muy importante porque nos sitúa en un punto de partida ventajoso para en 2024 poder cumplir nuestro objetivo del 2%», declaró el ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo.
Durante la campaña de Navidad, el gasto de los hogares creció un 0,3%, aunque a un ritmo menor que en trimestres anteriores. El gasto de las Administraciones Públicas se mantuvo estable en el 1,4%, mientras que las inversiones siguieron una tendencia a la baja con un incremento del 0,2%. Entre los componentes, se destaca una reducción del 2% en la Formación Bruta de Capital Fijo (FBCF), principalmente debido a la disminución del 5,2% en la inversión en maquinaria y bienes de equipo.
En cuanto al sector exterior, se observa una recuperación significativa en el cuarto trimestre, con las exportaciones de bienes y servicios aumentando un 2,9% y las importaciones un 2,7%.
Es importante destacar que el INE ha revisado al alza las cifras de crecimiento trimestral del PIB para el resto del año, situándolas en un 0,5% para los primeros y segundos trimestres y un 0,4% para el tercer trimestre.
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