La gestión de las cuentas públicas y la financiación de las comunidades autónomas continúa siendo un debate candente a nivel político y económico. Del total de las 17 regiones autonómicas que hay en España, en 2023 solo cinco de ellas cerraron sus cuentas con superávit.
España en su conjunto cerró el pasado ejercicio con un déficit de 53.556 millones de euros, lo que supone 10.180 millones de euros menos que al término de 2022. María Jesús Montero, ministra de Hacienda, ha declarado que España está por debajo de la tasa de referencia enviada a Bruselas, y que este ha sido el cuarto año en el que los resultados han mejorado a las previsiones.
La Administración General del Estado fue la que más déficit corrigió a lo largo del año pasado, reduciendo la diferencia entre los ingresos y los gastos en 10.348 millones de euros, hasta quedarse en 30.828 millones de euros.
En el caso de las comunidades autónomas, aunque en muchas de ellas se rebajó el déficit con respecto a los datos del año anterior, solo cinco acabaron con su cuentas en superávit. Se trata de Asturias, Baleares, Canarias, Cantabria y Navarra.
Comunidad Valenciana, Murcia y Cataluña fueron las regiones con más déficit
El avance de datos de ejecución presupuestaria del Ministerio de Hacienda ha puesto de relieve que las comunidades autónomas han rebasado en tres décimas la tasa de referencia comprometida con Bruselas.
El plan presupuestario fijaba el déficit autonómico en un 0,6% para el 2023, y finalmente este se desvió hasta un 0,9%.
La Comunidad Valenciana se posiciona como la autonomía con mayor déficit, alcanzando este un 2,45% del PIB, lo que equivale a 3.358 millones de euros de deuda. A pesar de ello, la región ha conseguido rebajar su déficit un 13% de un año a otro.
El segundo puesto lo ocupa Murcia, cuyo pasivo pasó de 1.060 millones de euros en 2022 a 901 el año pasado, lo que supone un 2,31% del PIB.
La tercera comunidad autónoma con más déficit en 2023 fue Cataluña, con un total de 3.616 millones de euros, equivalentes al 1,31% del PIB. Estas cifras suponen una caída del 6% con respecto a las de 2022.
En su conjunto, el déficit de las administraciones autonómicas se situó el año pasado en 13.254 millones de euros, equivalentes al 0,91% del PIB español. Datos que reflejan una rebaja de 1.865 millones de euros con respecto a los obtenidos en el año anterior.
A nivel local, las entidades locales cerraron 2023 con un déficit de 1.265 millones de euros, un 0,09% del PIB.
¿Por qué ha bajado el déficit?
La bajada entre la diferencia que existe entre los ingresos y los gastos públicos se justifica por el crecimiento económico, que se mantuvo sólido durante el año pasado. Y también por la positiva evolución del empleo, con datos de afiliación a la Seguridad Social que ya se sitúan cerca de los 21 millones de cotizantes, una cifra que nunca se había alcanzado con anterioridad.
Otro de los factores que ha permitido reducir el déficit público es que en 2023 se obtuvo una recaudación récord a través de los impuestos. Superando en casi 12.000 millones de euros a la previsión que se hizo a principios de año.
Las arcas del Estado recaudaron en 2023 un total de 271.935 millones de euros, algo que la ministra de Economía también achaca a la mejora de la actividad económica y al dinamismo del empleo.
A pesar de que durante el año pasado estuvo en vigor la medida de rebaja del IVA para alimentos básicos y para la luz y el gas, se recaudaron 83.909 millones de euros a través de este impuesto, un 1,6% más que en 2022.
A través del IRPF se recaudaron 120.280 millones de euros, lo que supone un incremento de casi el 10% con respecto a las cifras del año anterior. En el caso del Impuesto de Sociedades, la recaudación total en 2023 ascendió a 35.060 millones de euros, un 9% más que en 2022.
A pesar de ello, España todavía no se ha ajustado a la disciplina fiscal impuesta por Bruselas, y no ha cumplido con el objetivo de mantener el déficit por debajo del 3%. La previsión para este 2024 es que el déficit todavía siga por encima de ese límite.