El Banco Central Europeo ha aprobado este jueves una baja de 0,25 puntos en el tipo de interés. Se trata de la primera bajada desde marzo de 2016, hace más de ocho años, después de la escalada que comenzó en julio de 2022 como consecuencia de la inflación.
Con esta reducción de los tipos de intereés, el BCE es el primer gran banco mundial que decide tomar una decisión en este sentido, incluso por delante de la Reserva Federal de Estados Unidos. «Es ahora apropiado moderar el grado de restricción de la políica monetaria tras nueve meses, en los que los tipos de interés se han mantenido sin variación», apunta Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo.
Esta decisión llega cuando la inflación se acerca al objetivo del 2%. El pasado mes de mayo, se situó en el 2,6% en la Zona Euro y pese a que repuntó ligeramente en comparación con abril, la tendencia es favorable.
Y la prueba está en que el BCE ha recidido reducir los tipos de interés después de dos años al alza. Desde julio de 2022, que comenzó el ascenso, se han producido diez subidas consecutivas para paliar la inflación provocada por la guerra de Ucrania.
Con esta bajada, el tipo vinculado a los depósitos baja al 3,75% y el interés relacionado con el crédito se reduce al 4,25%. Pese a la baja, los tipos de interés siguen alcanzando cifras históricas y no parece que vayan a tener demasiada repercusión para las personas hipotecadas.
El 18 de julio habrá una nueva reunión del BCE y podría repetirse la bajada de los tipos de interés. Sin embargo, desde la institución instan a seguir manteniendo la prudencia.
«Nuestra determinación es garantizar que la inflación vuelva al 2% a medio plazo y mantendremos los tipos en niveles suficientemente restrictivos para conseguirlo», señalan. Y para ello, irán tomando decisiones «reunión a reunión» en función de los datos en cada momento.