Este martes el Tesoro Público ha llevado a cabo la subasta pública de Letras a tres y nueve meses, la última que llevará a cabo a lo largo de este mes. Si bien el próximo 18 de julio se realizará la subasta de Bonos y Obligaciones del Estado. Las siguientes subastas de Letras se desarrollarán en agosto, el día 6 las Letras a seis y 12 meses y el 13 las de tres y nueve meses.
A diferencia de otras subastas, en esta ocasión la rentabilidad ofrecida ha estado por debajo de la del mes anterior, marcando el mínimo anual. A pesar de ello, las adjudicaciones vuelven a estar por debajo de las peticiones, ya que la demanda de Letras sigue incrementándose.
El Tesoro Público coloca 2.031,52 millones de euros en Letras del Tesoro
El Tesoro ha logrado colocar 743,21 millones de euros en la subasta de Letras a tres meses y 1.288,31 millones de euros en la emisión de Letras a nueve meses. Frente a una demanda de 1.688 millones en el primer caso y de 3.103 millones de euros en el segundo.
La rentabilidad media de las Letras a tres meses se ha situado en 3,293%, que se posiciona como la más baja en lo que va de este año, y también es la más baja desde junio de 2023.
En el caso de las Letras del Tesoro a nueve meses, su rentabilidad media se ha reducido hasta el 3,407%, frente al 3,488% que había marcado en la subasta de junio.
Esta bajada está en consonancia con lo que ya habían previsto los expertos, que creen que la rentabilidad comenzará a bajar ahora que el Banco Central Europeo (BCE) ha dado el primer paso para bajar los tipos de interés. Aunque se espera que la rentabilidad media se mantenga en torno al 3,3% a lo largo de los meses de verano.
Vinculación con los tipos de interés
Las Letras del Tesoro se han convertido en uno de los productos de inversión más demandados por los hogares en el último año porque, a medida que el BCE subía los tipos de interés para intentar frenar la escalada de la inflación, subía la rentabilidad de este producto. De hecho, a finales de 2023 se alcanzaron máximos de rentabilidad que no se habían registrado en décadas.
Sin embargo, tras la mejora en la contención de la inflación que se ha notado en Europa en los últimos meses, el BCE decidió en junio comenzar a bajar los tipos de interés. En consecuencia, la rentabilidad de las Letras del Tesoro está a la baja.
Desde el Banco Central Europeo ya han confirmado que la bajada de los tipos no será rápida, y solo se prevé que haya dos ajustes más en lo que queda de año, uno en septiembre y otro en diciembre. Por eso, los especialistas creen que la rentabilidad de las Letras del Tesoro todavía permanecerá elevada durante algunos meses más.
En comparación con la rentabilidad que ofrecen los bancos por otros productos de ahorro e inversión, los inversores reciben más por comprar Letras del Tesoro. Además, este es un producto considerado como seguro, porque está respaldado por el Estado. Y a ello se suma que sus plazos de vencimiento son cortos (3, 6, 9 o 12 meses), mientras que los depósitos bancarios suelen abonar los intereses una vez al año.
La demanda minorista de Letras está en máximos históricos
Aunque la rentabilidad de este producto de inversión está bajando ligeramente, la demanda de Letras del Tesoro continúa creciendo. Desde hace más de un año, la oferta de Letras no cubre toda la demanda, hay personas interesadas en invertir que no pueden acceder a este producto porque no se comercializan suficientes Letras.
En la subasta de este martes, la demanda se ha acercado a los 5.000 millones de euros, que es más del doble de lo que finalmente se ha adjudicado.
Para este ejercicio, la estrategia de financiación del Tesoro prevé obtener unos 55.000 millones de euros a través de la subasta de Letras, Bonos y Obligaciones del Estado, lo que supone una reducción de 10.000 millones de euros con respecto a la financiación obtenida por este canal en 2023.