Según ha publicado el Instituto Nacional de Estadística (INE) este martes, el Índice de Precios de Consumo (IPC) ha experimentado una moderación de seis décimas en su tasa interanual, situándose en un 2,8%. Este es el nivel más bajo registrado desde febrero pasado.
El descenso en la tasa del IPC se atribuye principalmente a la disminución de los precios de la electricidad y los alimentos. También ha influido, aunque en menor medida, el sector del ocio y la cultura, cuyos precios han mostrado un aumento menor en julio de este año en comparación con el mismo mes de 2023.
Con este descenso del IPC en el séptimo mes del año, la inflación ha encadenado dos meses consecutivos de caídas, tras los incrementos registrados en marzo, abril y mayo.
La inflación subyacente se equipara al IPC
En su avance de datos del IPC, cuya publicación definitiva será el 13 de agosto, el INE ha incluido una estimación de la inflación subyacente, que no incluye alimentos no elaborados ni los productos energéticos. En julio, esta inflación subyacente ha igualado la tasa general del IPC, situándose también en un 2,8%, tras una disminución de dos décimas respecto a junio.
El IPC armonizado se sitúa en el 2,9%
En cuanto al Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA), la tasa de variación anual estimada para julio es del 2,9%, lo que representa una reducción de siete décimas en comparación con el mes anterior, bajando siete décimas con respecto al mes de junio.
En términos mensuales, comparando julio con junio, el IPC ha registrado una contracción de cinco décimas, después de haber experimentado seis meses consecutivos de aumentos.
El INE publicará los datos definitivos del IPC de julio el próximo 13 de agosto.