El Consejo General de Economistas (CGE) mantiene su previsión de crecimiento económico para España en este 2024 en el 2,9 %, en base a los datos del último Observatorio Financiero llevado a cabo por la entidad. Esta previsión está cinco décimas por encima de la anunciada por el Gobierno.
Los especialistas confían en que el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) producido en los primeros dos trimestres se mantenga en lo que queda del año, aunque destacan que podría ser algo más lento.
El peso del turismo
El turismo continúa siendo el gran motor económico. En 2023 esta actividad supuso un 12,8 % del PIB, el máximo en su serie histórica, y se espera que este año se superen esos datos, gracias al número récord de visitantes extranjeros que han llegado en los primeros siete meses del año.
A falta de confirmación, es previsible que los datos de agosto superen a los de julio, y que la temporada estival pueda prolongarse hasta octubre si hay temperaturas suaves. Para los expertos, esto dará lugar a que el peso del turismo en la economía sea todavía mayor y continúe contribuyendo a su crecimiento.
Buen comportamiento de los precios
El estudio del CGE destaca también el buen comportamiento que han mostrado los precios en los últimos meses, pero especialmente el pasado agosto. Los precios se moderaron hasta seis décimas con respecto al mes anterior, hasta el 2,2 %, lo que supone la tasa más baja en lo que va de año. Por su parte, la inflación subyacente se moderó una décima y quedó en un 2,7 %.
Agosto ha sido el segundo mes consecutivo en el que el Índice de Precios al Consumo (IPC) ha estado a la baja, lo que lleva a los especialistas a afirmar que el fin de la crisis inflacionaria está un poco más cerca.
La inflación también ha mostrado mejoras en su comportamiento en el conjunto de Europa, lo que podría llevar al Banco Central Europeo (BCE) a anunciar una nueva rebaja de los tipos de interés tras su reunión del próximo 12 de septiembre. Una rebaja de los tipos contribuiría a reactivar el mercado inmobiliario y a facilitar la financiación a las empresas, lo que estimularía la inversión y favorecería el crecimiento económico.
El empleo se mantiene fuerte
Tras varios meses de subidas, agosto ha reflejado una acusada destrucción del empleo con el fin de la temporada estival. El pasado mes se destruyeron 193.704 empleos, la cifra más alta para este mes en los últimos cinco años.
A pesar de ello, el Colegio General de Economistas se muestra optimista respecto al futuro y revisa a la baja la previsión de la tasa de paro para este 2024, situándola en un 11 %. Sin embargo, esta tasa sigue siendo la mayor de la zona euro.
Previsiones para 2025
De cara al año que viene, el CGE cree que este será un buen año en lo que al crecimiento económico se refiere, con crecimiento del PIB, moderación de la inflación y bajada del paro.
Los expertos confían en un crecimiento sostenido del PIB tanto a nivel interno como a nivel global, con un crecimiento muy similar al previsto para este año, en torno al 2,9 %. De nuevo, la inversión y el consumo privado serán los principales motores de ese crecimiento, estimulados ambos por un entorno financiero en el que será más fácil acceder al crédito tras el comienzo de las rebajas de los tipos de interés.
Destacan el papel que va a tener la inversión en infraestructuras y en tecnología digital a través de los fondos europeos como otro de los pilares del crecimiento, porque contribuirá a modernizar sectores clave como el de las energías renovables o el transporte, mejorando con ello la competitividad del país.
El CGE confía en que el mercado de trabajo continúe mostrando síntomas de mejora, con la creación de empleo más estable. Destacan que procesos como la digitalización y la automatización, en lugar de destruir empleos como muchos pensaban, está contribuyendo a generar nuevas oportunidades de trabajo en sectores emergentes.
Respecto a la inflación, se espera que se mantenga dentro de niveles moderados, y que 2025 sea por fin el año en que la crisis inflacionista llegue a su fin a nivel global.
Entre los retos que tiene que asumir la economía española, destacan los conflictos geopolíticos tanto en Ucrania como en Oriente Medio, que podrían afectar al devenir de la economía europea si se produce un agravamiento de la situación.