A partir de este martes, 1 de octubre, la rebaja del IVA aplicada a los alimentos básicos y al aceite de oliva aumentará, y el tipo impositivo se establece en un 2% hasta el 31 de diciembre. Esta medida, que había permitido que el IVA de productos esenciales como el pan, los huevos, las verduras y la fruta se situara en el 0%, se implementó en respuesta a las dificultades económicas derivadas de los conflictos en Ucrania y Oriente Próximo.
El pasado mes de junio, el Gobierno aprobó un real decreto que prorrogaba estas medidas, con la intención de mitigar el impacto de la crisis en los hogares españoles. Con esta misma intención, el IVA del aceite de oliva, también tuvo una reducción, primero del 10% al 5% y luego al 0% desde el 1 de julio.
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, destacó que el aceite de oliva se integrará en la cesta de productos y alimentos básicos, lo que garantiza un tipo de impuesto superreducido en el futuro. Así, cuando se normalicen los tipos impositivos, el IVA del aceite de oliva se fijará en un 4%, en lugar del 10% que había estado vigente anteriormente.
Estas medidas buscan reducir un poco el impacto en la economía de los hogares por notable aumento de precios del aceite de oliva en el último año. Según los datos del IPC de agosto, su precio ha subido un 25,1% en comparación con el mismo mes del año anterior, acumulando un incremento del 170,5% desde enero de 2021.
Además, el tipo del 5% para la pasta y los aceites de semilla que se había prorrogado hasta el 30 de septiembre, se elevará a partir del martes al 7,5%.
Con estas modificaciones, el Gobierno busca cumplir las recomendaciones de la Comisión Europea para la retirada gradual de las medidas anticrisis y atiende la necesidad de apoyo a los consumidores en un contexto económico desafiante.