El sector del transporte por carretera no ha atravesado su mejor momento en los últimos años. A la subida de los precios de los combustibles se suma la escasez de mano de obra, que impide a muchas empresas reforzar sus plantillas.
Una de las reivindicaciones históricas de los profesionales que se dedican a la conducción de camiones de mercancías y de vehículos de transporte de pasajeros es que se mejoren sus condiciones de retiro de la vida laboral activa y se regule para ellos un sistema de acceso a la jubilación anticipada.
Ante la falta de atención a sus peticiones, CCOO y UGT han convocado una huelga general en el sector del transporte por carretera para el próximo 28 de octubre.
Denuncian el bloqueo sistemático
Los sindicatos llevan años denunciando que los conductores profesionales necesitan medidas específicas de jubilación anticipada por la naturaleza de su trabajo.
Los conductores están expuestos a largas jornadas de trabajo, con condiciones laborales muy exigentes y un alto nivel de estrés. Por eso, consideran que no es viable que tengan que esperar hasta los 67 años para jubilarse, ya que esto pone en riesgo la salud y la seguridad de los trabajadores, debido a la pérdida de reflejos para la conducción que se va experimentando a lo largo de los años.
Lo que persiguen las organizaciones sindicales es que los conductores profesionales de vehículos de mercancías y de pasajeros pasen a formar parte del colectivo de beneficiarios de los coeficientes reductores de la edad de jubilación por ejercer una profesión sometida a condiciones de penosidad y peligrosidad.
Este es un tema que está en la agenda de los sindicatos desde hace 20 años, pero que ha sufrido un «bloqueo sistemático» por parte del Gobierno desde hace más de una década.
En una rueda de prensa conjunta, representantes de UGT y CCOO han denunciado que «la situación ha llegado a un punto en el que no cabe otra alternativa. No es de recibo que conductores de más de 67 años estén trasladando ancianos y niños».
Los sindicatos proponen una alternativa
Hasta que los trabajadores acumulen los coeficientes reductores, lo que plantean los sindicatos es una solución provisional. Esta consistiría en contemplar en el convenio colectivo una jubilación parcial voluntaria con contrato de relevo.
Así, los conductores de más edad seguirían acumulando horas para acceder a esos coeficientes reductores y, a la vez, se daría paso a las generaciones más jóvenes.
Los sindicatos acusan al Gobierno y a las patronales de estar bloqueando el acceso de los conductores profesionales al mecanismo de coeficientes reductores por razón de la actividad. En el comunicado difundido por CCOO tras el anuncio de la huelga, se expone que «la huelga general del sector no es únicamente para exigir la regulación al Gobierno, es una huelga contra las patronales del transporte por carretera como responsables directas de las condiciones de trabajo en el sector y de garantizar la seguridad y la salud de las personas conductoras de edad avanzada».
Se han convocado siete días de paros
La huelga de transporte se va extender a lo largo de siete días entre los meses de octubre y diciembre, con la amenazada de poder llegar a ser indefinida si no se atienden las reivindicaciones sindicales.
Están llamadas al paro las plantillas del transporte de mercancías y viajeros por carretera y las de transporte público urbano y sanitario. En total, medio millón de personas.
La convocatoria ya ha sido depositada en el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA).
Las fechas escogidas para los paros son:
- 28 de octubre.
- 11, 28 y 29 de noviembre.
- 5, 9 y 23 de diciembre.
En su comunicado, los sindicatos piden comprensión a la sociedad por los efectos negativos que pueda ocasionar la huelga. Y recuerdan que, en última instancia, esta medida también busca velar por la seguridad vial de todos.
Las organizaciones sindicales reclaman al Gobierno que se lleven a cabo los estudios necesarios para determinar los coeficientes reductores de la edad de jubilación para los conductores profesionales y, en caso de que no se atiendan sus peticiones, no descartan que los paros pasen a ser indefinidos antes de que comience la Navidad.
También destacan que este ajuste en la jubilación haría la profesión más atractiva para las generaciones más jóvenes, lo que favorecería la entrada en la misma de nuevos conductores.