Halloween, la fiesta estadounidense más exportada del mundo, tienen desde hace algo más de una década un fuerte impacto en los negocios europeos.
La festividad tiene cada vez más adeptos y genera un movimiento económico significativo en diferentes sectores como la industria, la logística y el comercio minorista.
Un fenómeno de consumo desatado
Halloween ha dejado de ser una celebración exclusiva de algunos países anglosajones para convertirse en un evento a nivel global. A medida que la fiesta se populariza, se dispara el consumo asociado a la misma.
En las semanas previas a la última noche de octubre la producción y la venta de dulces y golosinas experimenta un importante pico.
De hecho, cada vez es más habitual que grandes cadenas de supermercados y tiendas especializadas dediquen un espacio más o menos amplio en sus establecimientos para poner a disposición del público productos dulces con esta temática.
En el sector del ocio, son pocos los establecimientos que se resisten a organizar fiestas de disfraces y otros eventos relacionados con Halloween. En solo una noche, los ingresos por entradas y consumiciones se multiplican ante la subida de afluencia de público.
Parques temáticos, cines y otros establecimientos también aprovechan el tirón que tiene esta fiesta para ofrecer actividades especiales que ayudan a traer a sus instalaciones a un público más amplio.
A ello se suma un incremento en la demanda de disfraces. Para las empresas especializadas en la fabricación de este tipo de caracterizaciones y en la venta de estos artículos, Halloween es ya como un segundo carnaval.
En España, uno de los últimos sectores en aprovechar el tirón de la fiesta más terrorífica del año ha sido el de la decoración. Las tiendas especializadas en artículos para el hogar están llenas estos días de calabazas, telarañas artificiales, luces de colores y todo tipo de elementos decorativos.
Las cifras van en aumento
La Agencia EFE recogía el año pasado las declaraciones de un directivo de una importante empresa española distribuidora de disfraces que prefería mantenerse en el anonimato. Este manifestó que iba a poner a disposición de los clientes unos 300.000 disfraces, un 15 % más que en 2022.
Representantes de otras grandes empresas del sector, como Disfrazzes y Don Disfraz, coincidían a la hora de afirmar que Halloween se ha convertido ya para su sector en la segunda festividad más importante del año, solo superada por el carnaval. Y que en los últimos años los pedidos para esta campaña han crecido por encima del 200 %.
De media, el año pasado los españoles gastaron en disfraces para Halloween unos 30 euros, cifra que podría verse superada este año por el incremento del interés de los niños y los adultos en esta fiesta.
En el sector de las golosinas también hacen ya números sobre lo que supone esta campaña. Estas empresas facturan unos 6.750 millones de euros al año, y desde la patronal confirman que cada vez es más común que las ventas se incrementen a lo largo del mes de octubre, hasta representar el 10 % del total del ejercicio.
No obstante, la mayoría de los ingresos que obtienen estas empresas en Halloween procede de sus exportaciones al exterior. Se estima que siete de cada 10 kilos de caramelos, chicles y golosinas vendidos corresponden a exportaciones.
Las calabazas, que están de temporada en otoño, son otras de las grandes protagonistas de esta festividad. Las distribuidoras de esta hortaliza han experimentado un crecimiento en las ventas de este producto, exportando hasta un 80 % de la producción.
En 2023, los mayoristas agrícolas habían aumentado su producción entre un 30 % y un 35 % para poder abastecer a los mercados ante una demanda que no deja de crecer.
En el sector del ocio la noche de Halloween se considera ya una de las más lucrativas del año, solo superada por Nochevieja. Para poder ofrecer un mejor servicio, las empresas dedicadas al ocio nocturno realizan más de 18.000 contrataciones para este tipo de eventos.
Entorno al 94 % de las fiestas temáticas se realizan en establecimientos de ocio nocturno, pero otros negocios de ocio también se benefician de la festividad. Los parques temáticos aumentan sus visitas estos días algo más de un 10 % con su «temporada de Halloween».
En Estados Unidos, país en el que Halloween es una de sus fiestas más populares, el gasto para su celebración ronda los 12.200 millones de dólares según datos de la Federación Nacional del Retail. En España las cifras son mucho menores, pero se ha apreciado un notable incremento en los últimos 10 años, y se espera que la tendencia a celebrar esta fiesta y gastar en dulces, disfraces y ocio siga en aumento.