La Comisión Europea ha reajustado su previsión de crecimiento y ha elevado la de España hasta el 3 % del Producto Interior Bruto (PIB).
Las Previsiones de Otoño de Bruselas hablan de dos ejercicios de fuerte crecimiento económico, seguidos de una ralentización para el año 2026.
Cifras superiores a las del Ejecutivo
Las previsiones de crecimiento de la Comisión Europea para este año y el próximo superan los cálculos que había realizado con anterioridad el Ejecutivo español.
Mientras que el Gobierno prevé un crecimiento del 2,7 % del PIB para este año, Bruselas eleva esa cifra hasta el 3 %.
De cara a 2025 y 2026 la Comisión Europea habla de un crecimiento del 2,3 % y el 2,1% respectivamente, que también están por encima de las previsiones realizadas a nivel nacional.
De cumplirse estas previsiones, España acabaría el año siendo la economía que más crece dentro de las grandes economías del euro. Por encima de Alemania, Francia e Italia.
Evolución a nivel europeo
Alemania, considerada la «locomotora europea», lleva dos años sumergida en una fuerte crisis económica. Las previsiones para este año hechas por la Comisión Europea hablan de una contracción del 0,1 %. Para los dos ejercicios siguientes se prevén crecimientos del 0,7 % y el 1,3 %, respectivamente.
En el caso de Francia, se espera que termine este año con un crecimiento del 1,1 %, mientras que su crecimiento en 2025 se prevé en un 0,8 % y en un 1,4 % para 2026.
Italia expandirá su economía un 0,7 % este año, y lo hará un 1 % en 2025 y un 1,2 % en 2026.
De entre todas las economías de la Unión Europea, la que más va a crecer en términos generales es la polaca. Bruselas prevé un crecimiento del 3,6 % para este año y del 3,1 % para los dos siguientes.
El déficit público y las consecuencias de la DANA
Bruselas estima que España cumplirá el objetivo de rebajar el déficit por debajo del límite del 3 % establecido a nivel europeo a lo largo de este año.
A finales de 2023 el déficit público español era del 3,6 %, pero las previsiones apuntan a que estará por debajo del 3 % permitido al finalizar 2024. Algo que librará a España de posibles sanciones.
Bruselas ha destacado que la crisis derivada de las inundaciones provocadas por la DANA del pasado 29 de octubre, y la gran cantidad de dinero público que va a ser necesario para dar ayudas a los damnificados y recomponer las infraestructuras dañadas, podría tener un impacto en el déficit.
En este sentido, la Comisión Europea se ha mostrado flexible para que los gastos derivados de la reconstrucción de los destrozos causados por la DANA no computen como déficit a la hora de examinar la disciplina fiscal.
Las autoridades europeas han confirmado que van a trabajar junto con las españolas en la reorientación del plan de recuperación, para que los fondos de este se puedan dedicar a la reconstrucción.
Por lo que respecta al déficit previsto para 2025 y 2026, Bruselas no se muestra demasiado conforme con los datos del Ejecutivo.
En base a la senda de estabilidad planteada por el Gobierno ante Bruselas, el déficit público debería bajar al 2,5 % en 2025 y al 2,1 % en 2026. Pero los datos de la Comisión Europea no coinciden, porque prevé una déficit del 2,6 % para 2025 y del 2,7 % para 2026.
En materia de deuda pública, la Comisión Europea calcula que España acabará 2024 con una deuda equivalente al 102,5 % de su PIB, lo que supone una rebaja frente al 105,5 % vaticinado el pasado mes de mayo. De cara a 2025, la previsión habla de un descenso al 101,3 % y al 101,1 % para 2026.