La semana pasada, el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 sancionó a cinco de las mayores aerolíneas lowcost que operan en España por prácticas abusivas.
Esta multa histórica asciende a casi 179 millones de euros y ha recaído sobre Ryanair, Vueling, Easyjet, Norwegian y Volotea, que todavía pueden recurrir a los tribunales.
Conductas abusivas
El Ministerio ha concluido que las cinco compañías llevan varios años aplicando prácticas irregulares que perjudican de manera grave los derechos de los pasajeros.
Una de las más habituales es la exigencia de un suplemento por llevar el equipaje de mano en cabina. Algo que, tal y como ha remarcado la justicia europea, no es legal.
La segunda práctica abusiva detectada consiste en exigir un sobrecoste sobre el precio del billete para la reserva de asientos contiguos cuando se viaja con menores de edad o con personas dependientes. Cuando en estos casos son las propias aerolíneas las que exigen que estas personas viajen con alguien que les cuide y se haga cargo de ellas.
Otra de las conductas sancionadas consiste en no permitir el pago en metálico en los aeropuertos españoles. De esta forma, si el pasajero tiene que pagar por facturar su equipaje una vez que está en el aeropuerto, se le exige que abone el importe con una tarjeta de crédito.
También se ha detectado la tendencia a cobrar una tasa desproporcionada y abusiva cuando es la aerolínea la que imprime la tarjeta de embarque. En el caso concreto de Ryanair, esta ha sido sancionada por «una práctica por la cual se cobra una cantidad desproporcionada a los usuarios y a las usuarias por imprimir el billete en la terminal cuando no disponen de él», señala el Ministerio.
Las últimas de las irregularidades sancionadas son las «omisiones engañosas de información y falta de claridad en los precios publicados tanto en su propia web como de terceros, dificultando la comparabilidad de ofertas de precios a las personas consumidoras y la toma de decisión por estas».
La nueva capacidad sancionadora del Ministerio
En 2014, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea estableció que las aerolíneas pueden cobrar a los pasajeros por el equipaje facturado, pero no por el equipaje de mano. Porque este tiene la consideración de elemento indispensable. Por tanto, si se ajusta a los criterios de peso y dimensiones establecidos por la aerolínea, no se puede cobrar por él.
A pesar de ello, en 2019 algunas compañías empezaron a cobrar por el equipaje de mano y esta práctica se extendió entre las denominadas lowcost.
El Ministerio de Consumo tenía esta práctica abusiva en su radar, pero hasta hace dos años no tenía competencias sancionadoras.
Una vez adquirida la competencia para sancionar, la Dirección General de Consumo inició en 2023 una investigación sobre las prácticas que se consideraban muy graves y que atentaban directamente contra lo establecido en la Ley General de Defensa de los Consumidores.
Como resultado de esa investigación, las sanciones propuestas por la Secretaría General de Consumo y Juego han sido confirmadas una vez desestimados los recursos de alzada interpuestos por las aerolíneas.
El importe de las sanciones
La sanción más alta se le ha impuesto a Ryanair y asciende a 107,7 millones de euros.
En el caso de Vueling su sanción es de 39,2 millones de euros. Le sigue Easyjet con una sanción de 29 millones de euros. En el caso de Norwegian y Volotea, las sanciones son mucho menores, de 1,61 millones y 1,18 millones de euros, respectivamente.
Las cuantías se han determinado atendiendo al beneficio ilícito obtenido. Como Ryanair es la empresa que más se ha beneficiado con este tipo de prácticas que se consideran abusivas, recibe la sanción más alta.
Otros países podrían sancionar a las aerolíneas
Pablo Bustinduy, ministro de Consumo, ha señalado que varios gobiernos europeos han mostrado interés en el expediente que ha derivado en la sanción a las aerolíneas que aplican prácticas abusivas, y cree que en breve algunos de ellos empezarán a tomar medidas similares.
El Ministro también ha restado importancia a la afirmación de las aerolíneas sancionadas de que las multas son ilegales, ya que señala que estas se basan en lo que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha establecido en varias ocasiones.