El secretario general de UGT, Cándido Méndez, afirmó este jueves que la «rectificación» del Gobierno para que los ayuntamientos puedan endeudarse no será la única, ya que después de la huelga general del 29 de septiembre, tendrá que rectificar «sus despropósitos muy peligrosos y muy negativos» de la reforma laboral.
El secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, se manifestó en el mismo sentido y señaló que «parece que lo era bueno hace unos días ya no lo es en estos momentos, y mostró su confianza en que después de la huelga general salga un cambio de las políticas del Gobierno.
Toxo señaló que el acto de este jueves pretende dar el impulso definitivo al camino hacia la huelga general, cuyo desencadenante ha sido la reforma laboral, «primero con el real decreto y este jueves con la loca carrera precipitada para su convalidación».
El pleno del Congreso aprobó este jueves el texto definitivo de la reforma laboral que incluirá mayor control a los desempleados y facilitará las causas del despido objetivo por absentismo laboral. La reforma contempla la rebaja del 5% al 2,5% el porcentaje de absentismo laboral total que puede tener una empresa para poder expedientar a un empleado por faltas al trabajo.
El texto dice que se puede despedir «por faltas de asistencia, aún justificadas pero intermitentes, que alcancen el 20% de las jornadas hábiles en dos meses consecutivos, o el 25% en cuatro meses discontinuos dentro de un periodo de doce meses, siempre que el índice de absentismo total de la plantilla del centro de trabajo supere el 2,5%, en los mismos períodos de tiempo».
Ante estas modificaciones, Toxo asegura que la reforma laboral no pierde «la carga agresiva y lesiva a los derechos laborale. Asimismo, insistió en que la reforma facilita el despido, dificulta la contratación estable e impulsa la contratación temporal y subrayó que no aceptará, «en la medida que los trabajadores nos acompañen, el retraso obligatorio de la edad de jubilación a los 67 años.
Por su parte, Méndez abogó por defender lo que necesitan los trabajadores, «para labrar el futuro y que el presente sea un compromiso solidario con la crisis». Asimismo, resaltó que la reforma no será un revulsivo para luchar contra el paro, que facilita el despido y debilita la tutela judicial, «lo que hará que España siga siendo en el futuro la de mayor nivel de paro en Europa».
Los sindicatos avisan a Zapatero del éxito en Francia
Los secretarios generales de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, y de UGT, Cándido Méndez, dijeron este miércoles que la huelga general será «un huelgón» y que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero debería tomar nota del éxito que el paro general ha tenido en Francia.
El líder de CCOO dijo que «no podemos asistir» de forma impasible a la «demolición» del pacto de Estado que hay detrás de la iniciativa del Gobierno, con la vulneración de algunos elementos de modificación del sistema de pensiones y la congelación de las mismas.
Por su parte, Méndez dijo que Zapatero debería tomar nota del éxito de la huelga general que «le han convocado» al presidente francés, Nicolás Sarkozy, y añadió que el 64% de los votantes del PSOE cree que la huelga es justa.
Zapatero no duda de la movilización ciudadana
El jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha considerado este jueves que es prematuro hablar de cuál va a ser la respuesta ciudadana a la convocatoria de huelga general y ha restado valor a las encuestas que minimizan su repercusión al destacar la capacidad de movilización que tienen los sindicatos.
En una conversación informal con periodistas en el Congreso después de que el pleno aprobara definitivamente la reforma laboral, Zapatero ha estimado que hasta la semana previa al paro, convocado para el 29 de septiembre, no se pueden hacer estimaciones del seguimiento que tendrá.
Respecto a la reforma recién validada por el Parlamento, ha señalado que hasta dentro de unos meses no se conocerán sus efectos.
A su juicio, se requiere un periodo de aprendizaje de las nuevas normas del mercado laboral por parte de todos los sectores, desde los empresarios hasta los trabajadores.
Blanco reta a los sindicatos a que asuman la nueva ley
El ministro de Fomento, José Blanco, consideró que la reforma allanará el camino para resolver los problemas relacionados con el empleo, por lo que confió en que «los sindicatos asuman cuanto antes que es positiva para todos los trabajadores».
Sobre la huelga general, Blanco afirmó que «es lo que menos conviene a la economía del país, aunque expresó su «respeto» ante la convocatoria.