El director financiero de BBVA, Manuel González Cid, ha tildado de «paso decisivo y definitivo» la reforma financiera aprobada por el Gobierno para sanear los balances bancarios de los activos ligados al ‘ladrillo’, al asegurar que elevará la demanda de crédito dentro de una consolidación del sector.
En una conferencia con los medios, González Cid admitió que la nueva normativa impone al sector requerimientos «duros y muy intensos», si bien aseguró que facilitan afrontar de forma «radical» las incertidumbres sobre la valoración real de los activos inmobiliarios.
A la mejora esperada en la demanda del crédito, el directivo de BBVA también agregó una previsible normalización de los márgenes de las entidades financieras.
González Cid, quien negó que la entidad «tenga en mente» en estos momentos alguna operación con otra entidad, descartó que la reforma financiera vaya a suponer un recorte del dividendo en este ejercicio.
En este sentido, recordó que BBVA someterá a junta general mantener un dividendo total de 0,42 euros por acción, con dos pagos en efectivo y otros tantos dejando la opción de canjear la retribución por nuevas acciones.
Preguntado sobre cómo afrontaría BBVA unos nuevas pruebas de resistencia con los actuales niveles de capital, el directivo vaticinó unos resultados «muy buenos», lo que justificó en el estrés que están sufriendo ya las cuentas con las nuevas regulaciones.
Estrella Digital/EP