Repsol ha cambiado su imagen de marca con el objetivo de reflejar «la nueva visión de la compañía sin perder la esencia de su identidad anterior» y, al mismo tiempo, dotarse de una expresión «más dinámica y vital».
El nuevo logo remplaza la banda azul anterior por otra blanca de líneas continuas y ligeramente curvas. El color anaranjado de la mitad superior se suaviza y en la parte inferior derecha se aprecia un leve sombreado.
Para la compañía, las características del logo, en el que se mantiene el nombre de Repsol con la misma tipografía, son «volumen, transparencia, uso del color blanco y efecto envolvente».
El cambio de imagen es fruto de un proceso iniciado a mediados de 2011 y persigue además el doble objetivo de ganar relevancia en los entorno actuales de comunicación y plasmar la evolución de la compañía.
El nuevo logo aparecerá no solo en la nueva sede madrileña de Repsol, sino en todas las comunicaciones de marca, el conjunto de edificios del grupo, las estaciones de servicio y el conjunto actividades dentro y fuera de España.
Estrella Digital/EP