La Comisión Europea (CE) afirmó hoy que España no puede retirar la licencia a aerolíneas registradas en otro país alegando razones de seguridad, por lo que no podría tomar una medida de ese tipo contra la compañía de bajo coste Ryanair, basada en Irlanda.
«Bajo las actuales leyes europeas de seguridad aérea, la autoridad para revocar una licencia operativa a una aerolínea por razones de seguridad pertenece exclusivamente al Estado en el que ésta está registrada», señaló a Efe el portavoz comunitario Dale Kidd.
«Es decir, a una aerolínea británica, solo podrían retirarle la licencia las autoridades británicas; en el caso de una aerolínea española, solo las autoridades españolas», indicó Kidd.
Las respuestas a cualquier tipo de dudas respecto a los estándares de seguridad aplicados por las aerolíneas, así como la imposición de sanciones también recaen sobre el país en el que la compañía está registrada.
La ministra española de Fomento, Ana Pastor, anunció el lunes que España va a promover la modificación del reglamento comunitario para que las autoridades de supervisión nacionales puedan ampliar sus competencias sobre las compañías aéreas extranjeras de fuerte implantación en su territorio.
El Gobierno español señaló que pretende endurecer las sanciones contra las aerolíneas y garantizar que cumplen con los estándares de seguridad, tras los incidentes protagonizados durante este verano por Ryanair, aunque Pastor eludió hacer referencia a la misma durante su comparecencia.
El portavoz comunitario señaló que la CE no ha recibido aún ningún tipo de información formal sobre esta iniciativa y evitó hacer comentarios sobre su contenido hasta que reciban la propuesta completa.
Kidd sí manifestó la disposición del Ejecutivo europeo para mejorar la normativa en Europa sobre la notificación de incidencias aéreas que tienen lugar en el territorio de un país determinado, pero involucran a aerolíneas registradas en otro Estado miembro. «Esto es algo que la CE respaldaría firmemente y, de hecho, estamos trabajando en una propuesta de este tipo», indicó el portavoz.
Por el momento, bajo la legislación actual, Kidd indicó que si un país tiene «dudas» sobre si una aerolínea basada en otro país cumple con las condiciones de seguridad, puede llevar el caso ante este país o a la Comisión Europea para que tomen medidas.
También recordó que existe un control permanente a nivel europeo sobre las cuestiones de seguridad relacionadas con el transporte aéreo, de las que se encarga el Comité de Seguridad Aérea.
«Si hay alguna preocupación a nivel europeo respecto a que un Estado miembro no ha tomado las acciones apropiadas, la cuestión puede ser llevada ante el Comité de Seguridad Aérea», apuntó Kidd.