Seat ha informado este martes de que ha equipado un total de 700.000 vehículos con los motores diésel EA189, que incorporan el software diseñado para manipular las emisiones de gases contaminantes, lo que supone un 6,3% de los 11 millones de coches afectados de todo el Grupo Volkswagen, han informado en fuentes oficiales de la automovilística española.
Según las fuentes, estos 700.000 vehículos se han distribuido por la red mundial de Seat y actualmente se está determinando cuántos de ellos se vendieron en cada mercado.
Seat y Volkswagen-Audi España han ordenado a sus concesionarios la suspensión temporal de la venta de vehículos de las marcas Seat, Volkswagen, Audi, Skoda y Volkswagen Vehículos Comerciales equipados con motores diésel de la familia EA 189 y sujetos a la normativa europea. La medida afecta a 3.320 vehículos.
Industria reclamará que Volkswagen devuelva ayudas
El secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, ha afirmado que el Ministerio de Industria reclamará al grupo Volkswagen que devuelva las ayudas públicas que haya podido recibir incumpliendo los requisitos medioambientales que hubiera establecidos en cada convocatoria.
En declaraciones a los medios tras comparecer ante la Comisión de Industria del Congreso, Nadal ha explicado que el Ministerio ya ha requerido a todas las empresas del grupo alemán implicadas en el 'trucaje' de los motores para falsear los resultados de emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) que envíen toda la información sobre los modelos y vehículos fabricados y/o vendidos en España afectados.
«A partir de ahí, en función del alcance, se tomarán las medidas pertinentes para, en caso de haber recibido algún tipo de subvención bien sea a través del programa PIVE o de los programas de la Secretaría General de Industria que no correspondieran porque no cumplían con los requisitos medioambientales necesarios para ello, proceder a la reclamación de las ayudas», ha añadido Nadal.
Sin embargo, preguntado sobre la posibilidad de retirar el permiso de circulación a los vehículos que tengan instalado el software de falseamiento de resultados, como ya ha puesto sobre la mesa Alemania, Nadal ha recordado que ese asunto «no es competencia» de la Secretaría de Estado de Energía.
Así, se ha limitado a insistir en que hay que ver «el alcance» de la estafa para luego «exigir» a la empresa «todas las medidas correctoras» que permitan «restaurar la confianza» con unos consumidores que adquirieron sus vehículos «confiando» en la información sobre consumo y emisiones que suministraba Volkswagen. «No han tenido una información correcta y esa situación debe ser corregida de manera inmediata», ha zanjado.