El ministro de Industria, Energía e Industria, José Manuel Soria, ha informado este jueves de que el Grupo Volkswagen sostiene que el fraude en el registro de emisiones contaminantes en once millones de sus vehículos no afecta al plan de ayudas al vehículo eficiente (PIVE), ya que la manipulación altera las emisiones de óxido nitrógeno (NOx) y no las de dióxido de carbono (CO2), que son las que contempla dicho plan.
«Lo que nos han dicho es que las emisiones que regulan los planes de incentivos al vehículo eficiente no están afectadas por ese software. Hemos pedido documentación acreditativa de que técnicamente eso es literalmente así», ha declarado el ministro a la prensa en Luxemburgo, en donde se han reunido los ministros de Competitividad e Industria de la UE en la que examinan el alcance del fraude en el mercado europeo.
Soria ha eludido aclarar si ello implica que el Gobierno renunciará a reclamar al fabricante alemán o a sus filiales las ayudas, ya que es algo que estudia el Ministerio, tanto a nivel «técnico» como «jurídico».
Y ha recordado que son cerca de 700.000 vehículos los que el grupo ha vendido en España a través de sus distintas marcas con el motor trucado, pero que «no se sabe» cuántas de estas compras se han beneficiado de ayudas. En cualquier caso, Soria ha afirmado que «no hemos planteado, ni vamos a plantear la devolución» de los incentivos por parte de los compradores, ya que actuaron de buena fe.
El ministro español ha revelado que en la tarde del miércoles recibió en Madrid a una delegación de Volkswagen llegada desde Alemania y que fue en este encuentro cuando el vicepresidente a nivel mundial de la marca automovilística le ofreció las garantías sobre el impacto de la manipulación.
Los representantes de Volkswagen también informaron al ministro de que ultiman un «plan de acción» para ofrecer soluciones concretas «antes del 31 de octubre», con el objetivo de retirar «todos y cada uno» de los dispositivos instalados en once millones de motores diésel del grupo automovilístico en todo el mundo y que han permitido falsear los niveles de emisiones contaminantes reales durante controles oficiales.
Estos cambios, ha dicho el ministro, se realizarían en los concesionarios del Grupo Volkswagen para que sea el fabricante quien se haga responsable de «absolutamente todas las modificaciones técnicas» que sean necesarias para corregir la manipulación. Por último, el ministro Soria ha indicado que ha recibido información este mismo jueves de Volkswagen, tras verificar «bastidor por bastidor», que cifra en «aproximadamente 6.000» los vehículos en stock en España afectados, que han salido de fábrica, pero que aún no están vendidos.
«Son aproximadamente 6.000 vehículos, no llegan. Y han sido paralizados por resolución del Ministerio de Industria, Energía y Turismo para su venta en España», ha asegurado el ministro, para después recalcar que está a la espera de recibir «información técnica que avale» todo ello.
El Grupo Volkswagen estimó días antes en 3.320 los vehículos nuevos afectados en España y que iba a retirar de la venta de manera preventiva. Los ministros europeos han concluido su reunión sin decisiones concretas, pero con el compromiso de «agilizar» la tramitación de las nuevas normas europeas con las que se pretende incluir en el proceso de homologación pruebas en condiciones reales de conducción, y no sólo en laboratorio como hasta ahora, ha dicho Soria.