Las grandes empresas tributaron en el impuesto sobre sociedades a un tipo efectivo del 6,9 % en 2014, nueve décimas más que en el ejercicio precedente, según el informe anual de recaudación 2015 que elabora la Agencia Tributaria (AEAT).
El estudio señala que el pasado año los cambios normativos tuvieron una incidencia negativa sobre la recaudación, sobre todo por la bajada de tipos impositivos incluida en la reforma de la imposición directa.
A este respecto, calcula que los cambios legales mermaron la recaudación en 7.846 millones en 2015, frente al impacto positivo medido en los cinco años anteriores, con un aporte global de 37.624 millones.
Las medidas que más impactaron en la recaudación fueron las incluidas en la reforma de la imposición directa, con un coste para la recaudación de 2015 de 5.984 millones.
La reforma, que contemplaba un calendario de reducción progresiva de los tipos impositivos en 2015 y 2016, tuvo un impacto sobre la recaudación de 4.906 millones en las medidas iniciales y de 1.078 millones más al aprobarse en julio la intensificación de la bajada de la retención en la parte final del año.
Hacienda señala que en 2015 la recaudación tributaria gestionada por la AEAT ascendió a 182.009 millones, el 4 % más que en 2014.
El tipo efectivo sobre la renta y el gasto en 2015 se redujo el 0,8 %, mientras que el de las rentas brutas de los hogares bajó el 6,3 %, debido a la bajada de los tipos legales de retención en el IRPF.
En cambio, la AEAT destaca que hubo dos figuras con subidas significativas del tipo efectivo, que contrarrestaron la incidencia de la reforma sobre el tipo efectivo global.
En primer lugar, el de la base imponible del impuesto sobre sociedades, que creció el 15 % por los cambios de definición de dicha base; y en segundo lugar, la subida del 18,1 % en el tipo efectivo de hidrocarburos, por la caída en el precio antes de impuestos de los carburantes, que provoca que el peso de la imposición especial en el valor del producto consumido aumente, pese a que el impuesto no se haya modificado.
Los ingresos por IRPF bajaron el 0,4 %, frente al incremento del 10,3 % en el impuesto sobre sociedades.
Asimismo, la recaudación por IVA aumentó el 7,4 %, debido al aumento significativo de la base del impuesto, al que se añade también un ligero crecimiento en el tipo efectivo, mientras que la de los impuestos especiales creció el 0,2 %.
Respecto a las previsiones presupuestarias en 2015 hubo una desviación negativa de 4.103 millones, con un porcentaje de ejecución del 97,8 %.
Según Hacienda, entre las principales causas del desvío están la aprobación de rebajas en los tipos impositivos una vez avanzado el ejercicio, las devoluciones del céntimo sanitario (comenzaron a finales de 2014 y no se contemplaron en las previsiones) y el cambio en la gestión del IVA de importación, sin efecto global sobre la recaudación, pero que implicó un traslado de ingresos de 2015 a 2016.
Efe