Microsoft ha anunciado que dará los pasos necesarios para poner fin a los acuerdos legales de confidencialidad en el seno de la empresa, que han sido criticados por ayudar a perpetuar el abuso sexual en el lugar de trabajo.
El arbitraje permite a las empresas mantener las acusaciones de acoso y discriminación fuera de los tribunales, ocultándolas a la vista del público y, en algunos casos, permitiendo que los acosadores continúen su conducta durante años.
«El silenciamiento de las voces de las personas acosadas ha tenido un impacto claro en la perpetuación del acoso sexual», dijo Brad Smith, presidente y director jurídico de Microsoft, en una reciente entrevista.
La acción de Microsoft muestra cómo la avalancha de acusaciones de acoso ha ido más allá de los casos individuales para comprometer al conjunto de la cultura corporativa, lo que ha obligado a Microsoft a un mayor escrutinio de los acuerdos legales que han silenciado a las víctimas de abuso.
En un caso conocido, una cláusula de arbitraje casi impidió que Gretchen Carlson, la presentadora de Fox News, presentara su demanda por acoso sexual contra Roger Ailes, presidente y director ejecutivo de Fox News. Carlson encontró una maniobra legal para soslayar el acuerdo, pero muchas empleadas acosadas no tienen la misma suerte.
Según el Instituto de Política Económica, más de la mitad de los trabajadores estadounidenses están vinculados por las cláusulas de arbitraje. A principios de este mes, un grupo de senadores republicanos y demócratas, estudian el final de la legislación de arbitraje
Microsoft esta considerando eliminar el requisito del arbitraje para reclamaciones de acoso sexual por parte de sus propios empleados, a partir de que se apruebe la nueva legislación. Una medida simbólica debido a que una minoría de los empleados de Microsoft han estado sujetos al requisito. Microsoft aún exigirá que esos empleados presenten una reclamación de arbitraje. En total, Microsoft tiene alrededor de 125,000 empleados en todo el mundo.
Al igual que otras compañías de tecnología, Microsoft ha enfrentado acusaciones de que ha tolerado abusos contra sus empleadas. En un comunicado, Microsoft dijo que “no toleraba el acoso o el acoso sexual”.
Miguel de la Balsa