El desarrollo constante al que están sumidas las nuevas tecnologías ha permitido que cada vez sean más los servicios que se trasladan al ámbito online con el objetivo de aportar a los consumidores mayores facilidades. El último proyecto ha sido Dribo, una iniciativa que ha venido de la mano de Enric Romero, Alberto Pastor, Oscar Gallo y Manu Caldas, cuatro jóvenes provenientes de Barcelona que decidieron crear una aplicación que permita obtener el carnet de conducir de forma sencilla y accesible para todos los públicos.
A día de hoy, esta aplicación que pretende lograr un éxito mundial constituye una de las aplicaciones de referencia en España y Europa ya que nunca antes se había planteado la idea de adquirir dicha titulación sin asistir a clases físicas, tanto teóricas como prácticas. Sin embargo, esta aplicación que en un inicio no sabía la repercusión social que iba a tener, actualmente ya cuenta con una inversión inicial de 250.000 euros que permitirá asumir los costes y las mejoras que se llevarán a cabo en el proyecto e incrementar la plantilla con expertos en diferentes áreas para crear una aplicación de calidad.
Esta primera ronda de financiación ha sido posible gracias a la colaboración de numerosos inversores profesionales entre los que resaltarían Deloitte, Cuatrecasas, BCG (Boston Consulting Group), McKinsey & Co, Amazon y Antai (Wallapop, Cornerjob o Delibery) además del capital público que han obtenido por el apoyo de ENISA jóvenes emprendedores.
La aplicación que con tan solo tres meses ha obtenido más de 8.000 descargas ha resultado ser un gran avance en uno de los servicios más demandados en la actualidad. La edad media de los consumidores que han querido sumarse a esta nueva iniciativa es de 22 años, -un 60% son mujeres y un 40% hombres-.
Precios elevados, huelgas y mala organización ya no serán motivo para no sacarte el carnet de conducir. Con Dribo será más rápido ya que a través de la aplicación mLearning se podrá tener acceso a todo el temario y permitirá aprender de una manera más efectiva al conseguir una garantía del 100% de aprobados en los exámenes teóricos. Por otro lado, la práctica se realiza con vehículos propios y mediante acuerdos con las autoescuelas (marketplace).
Son muchas las personas que por motivos laborales o personales no pueden acudir de manera frecuente a las autoescuelas convencionales, hecho que provoca que se ralentice el proceso. Por eso, la idea de crear un modelo de aprendizaje personalizado fue la base para obtener la confianza de unos consumidores que cada vez demandan más y mejor en una sociedad que a día de hoy es completamente digital.
Dribo es fuente de numerosas ventajas entre las que destacarían la idea de tener en el dispositivo móvil una autoescuela disponible las 24 horas de los 365 días del año; ser un proceso sencillo que proporciona una mayor comodidad a los usuarios; la descarga es gratuita y solo habría que pagar cuándo se quiera hacer el examen; el proceso teórico de la aplicación es único en Europa al tener una metodología propia basada en la personalización y gamificación de ejercicios y además la plataforma fue creada para adaptarse a las necesidades de todos los optantes a sacarse el carnet vía online.
Según Según Enric Romero, CEO y Co-fundador de Dribo: “la plataforma nace con la voluntad de facilitar el acceso a la movilidad y de formar a los nuevos conductores y conductoras en la responsabilidad que supone ponerse al volante de un vehículo”. Así mismo también declaró que “No queremos que los jóvenes solo memoricen preguntas, sino que comprendan el nuevo rol que van a tener en la sociedad.”
Ana Paredes