La mente maestra de una marca automotriz y que ha innovado al poner la primera piedra de una planta alimentada por baterías, que sería el edificio más grande del mundo, y con el lanzamiento de cohetes con su empresa SpaceX.
No hay duda de que Tesla ha logrado varios avances que llevaron a los fabricantes ya establecidos de automóviles a batallar para ponerse a su altura. Comprobó que hay un mercado factible para los autos eléctricos y que pueden establecer precios exorbitantes.
Es pionera en instaurar métodos para renovar los autos a través de actualizaciones de software que pueden descargarse desde la nube, del mismo modo en que los iPhone pueden descargar nuevos sistemas operativos.
Además, fue el piloto automático lo que dio inicio a la carrera para desarrollar sistemas avanzados de asistencia automatizada que pueden guiar autos en ciertas situaciones y prevenir choques activamente, aunque al parecer la tecnología de Tesla ha sido superada por los sistemas de conducción automática de otras compañías, incluyendo GM y Waymo, la filial de Google.
Sin embargo, la empresa ha fallado constantemente en alcanzar sus propias metas y fechas límite, especialmente con el Modelo 3. Musk había predicho en un inicio que estaría listo en 2017 y que el auto aumentaría las ventas de la empresa a 500.000 autos al año para 2018. Más tarde disminuyó su proyección a 100.000 autos Modelo 3 en 2017. En el último trimestre del año pasado, Tesla solo fabricó 2425 autos Modelo 3.
Miguel de la Balsa