En un contexto en el que Iberdrola se ha convertido en la primera eléctrica de Europa por capitalización y una de las tres primeras del mundo, su presidente, Ignacio Sánchez Galán, ha compartido esos éxitos con 300 empleados procedentes de la treintena de países en los que opera la compañía.
Lo ha hecho este jueves, durante la clausura de la convención de Iberdrola que, durante dos días, se ha celebrado en Madrid. En ella, Sánchez Galán ha anunciado que las perspectivas de inversión de la multinacional durante los próximos 6 años de esta multinacional son de 100.000 millones de euros, en su mayoría destinados a redes de distribución.
El encuentro se ha celebrado cuando la compañía se encuentra en máximos históricos de valor en bolsa, con más de 85.000 millones de euros.
De hecho, desde 2001 ha multiplicado por siete su valor y, en la actualidad, la capitalización bursátil de la vasca es superior a la de todas sus competidoras españolas juntas.
Galán anima a sus empleados a que Iberdrola «sea la primera en el podio mundial»
Durante la reunión, de más de tres horas, el presidente de Iberdrola ha animado «a continuar haciendo de esta multinacional una empresa cada vez más grande y sólida, ahora que el modelo que la compañía lleva 25 años propugnando se ha demostrado el más adecuado».
Incluso, «a alcanzar el sueño de ser la primera en el podio mundial», ha subrayado.
También ha reflexionado sobre el contexto global y las «oportunidades» de la compañía en los próximos años, y ha respondido a más de 30 preguntas de empleados.
En relación con los logros recientes de la multinacional, Sánchez Galán ha mirado al futuro con optimismo, sobre todo tras el éxito de la salida de los ciclos combinados de México, así como las fuertes inversiones en Reino Unido y Estados Unidos.
Galán: «Tenemos un futuro brillante, pero no hay que caer en la autocomplacencia»
Y, en esta línea, Galán ha insistido en animar a todos los empleados «a seguir liderando el proceso de electrificación de la economía a nivel global, ahora que el Grupo -ha destacado- afronta las mayores oportunidades de inversión de su historia».
Un futuro que ha calificado de «brillante, pero que Iberdrola debe afrontar sin caer en la autocomplacencia», ha recalcado.
El presidente de Iberdrola, que se ha referido a la gestión del talento como «la gran clave del siglo XXI», ha trasladado a sus empleados que las cualidades fundamentales para el éxito de la compañía residen en «el esfuerzo, la coherencia, la constancia, la curiosidad y la honradez». Y ha animado a los directivos «a dar oportunidades de crecimiento y promoción a los miembros de sus equipos».