“Los rumores que apuntan a que una parte de las acciones de Repsol puede ser vendida a la empresa rusa Lukoil, reavivaron el debate en España sobre si los sectores estratégicos deberían estar protegidos de compradores extranjeros. Ayer, la controversia alcanzó el Congreso, donde el Presidente José Luis Rodríguez Zapatero fue advertido por la oposición de centro derecha de que la venta del grupo energético español equivaldría a ‘un escándalo monumental”.
“No obstante, en medio del predecible politiqueo, son pocos los que han perdido la ironía: Repsol es, al día de hoy, vulnerable a una Opa extranjera precisamente porque se trata de una operación destinada a fortificarlo contra invasores foráneos. Son muchos los analistas y observadores que se muestran escépticos por el hecho de que alguien que esté interesado lo suficientemente por Repsol llegue a pagar tanto dinero. Algunos manifiestan que nombres como Lukoil, que tiene sus propios problemas financieros, están siendo manejados sencillamente para asustar al gobierno para que saque de apuros a Sacyr. La oposición política ha estado pronta en sacar provecho de la incomodidad del gobierno” .
“’Repsol no es una cadena hotelera’ dijo ayer en el Congreso Mariano Rajoy. ‘No puede dejarse, para resolver los problemas de unos pocos, en manos de una dudosa empresa vinculada a un gobierno que ha utilizado la energía como arma”.