En un comunicado, el vicepresidente de Nokia, Timo Ihamuotila, explicó que «no es sostenible» que continúe la inversión en Japón de su compañía «en el actual clima económico global».
Los teléfonos móviles de Nokia no han sido nunca líderes en el mercado japonés, a diferencia de lo que ha ocurrido en muchos otros países, pues por lo general los nipones prefieren modelos domésticos equipados con numerosas funciones, como televisión.
Los modelos de Nokia los han comercializado en Japón las operadoras NTT Docomo y Softbank Mobile, ésta última dueña de los derechos del iPhone en este país.