Las sospechas sobre el programa nuclear han surgido de acuerdo con la documentación presentada por Estados Unidos y otros países el año pasado. Teherán considera que esos documentos son falsos, mientras que los inspectores del OIEA aseguran que sí podrían tener fundamentos.
Por su parte, la presidencia francesa de la Unión Europea (UE) destacó que la situación es «extremadamente preocupante». «La ausencia de cualquier tipo de cooperación de Irán con el OIEA sobre cuestiones tan graves es incompatible con las pretensiones del país de ejercer legalmente sus derechos en el marco del Tratado de No Proliferación (TNP)», dijo la delegación gala en nombre de la UE.
En el más reciente informe sobre Irán, el OIEA destaca que Teherán no ha suspendido, como lo exige la Junta de Gobernadores y el Consejo de Seguridad, su programa de enriquecimiento de uranio, un material de posible doble uso, militar y civil.
Estados Unidos, por su parte, destacó este jueves que el «déficit de confianza (con Irán) es tan profundo que es muy difícil de superar». El embajador estadounidense ante el OIEA, Gregory Schulte, precisó que los líderes de Irán tienen dos opciones: no cooperar y aislarse todavía más, o cooperar y facilitar así un acuerdo dialogado al conflicto.
Irán, que no ha contestado desde hace meses a ninguna de las preguntas de los inspectores sobre una posible dimensión militar de su programa nuclear, respondió diciendo que el trabajo del organismo ha sido «politizado» por Washington y sus aliados.
Por eso, el embajador iraní ante el OIEA, Ali Asghar Soltanieh, advirtió de que «la credibilidad, autoridad, integridad e independencia del organismo están en riesgo» e instó «a poner fin a este peligroso proceso, antes de que sea demasiado tarde».
Mientras que EEUU y la UE temen que Irán use sus conocimientos del enriquecimiento para fines militares, Teherán asegura que sólo tiene intenciones pacíficas como la generación de energía eléctrica y aplicaciones médicas.
¿Complejo nuclear en Siria?
Por otra parte, El Baradei confirmó en Viena que una instalación bombardeada en Siria por Israel el año pasado era similar a un complejo nuclear. Ese análisis se desprende de las imágenes por satélite tomadas justo después del ataque, ocurrido hace 15 meses.
El Baradei criticó a los Estados miembros del organismo por no haberle proporcionado con mayor antelación estas imágenes, un hecho que calificó como «lamentable y misterioso». Para el director de OIEA, la infraestructura del lugar, como las bombas de agua y la forma de los edificios, es «similar a lo que se puede encontrar en relación con un reactor nuclear». Además, en una visita de los inspectores del OIEA en junio pasado se encontraron «cantidades significativas» de uranio producidas mediante un proceso químico.
Siria asegura que la instalación atacada por la aviación israelí era un complejo militar convencional y afirma que las partículas encontradas proceden del armamento utilizado en el ataque.
Para poder esclarecer el origen de ese uranio, El Baradei instó este jueves a Siria a permitir nuevas inspecciones en localidades cercanas a la instalación bombardeada, lo que Damasco ha rechazado.
EEUU asegura que Siria iba a construir un reactor nuclear con fines militares, algo que el gobierno del país árabe niega.
La reunión de la Junta de Gobernadores termina este viernes, con deliberaciones sobre las actividades nucleares de Siria.