No pudo comenzar peor la gélida noche para el equipo rojiblanco. Heitinga intentó frenar a Tchité dejando la pierna hacia atrás en el área y derribó al racinguista de forma casi infantil. Tchité no falló la pena máxima y adelantó a su equipo.
Sin embargo, el equipo rojiblanco no se vino abajo y, en el minuto 21, Simao aprovechó una dejada de cabeza de Forlán para colocar el balón en la escuadra y poner el empate en el marcador.
El Racing se quedó con diez jugadores a la media hora de juego por la expulsión directa de César Navas al propinar una brutal patada en mitad de la pierna a Assunçao.
Consciente de los apuros que le tocaba pasar a su rival, el Atlético apretó el acelerador y llegó el segundo. Agüero recogió un pase en profundidad de Forlán -su segunda asistencia de gol de la noche- y batió a Toño en la salida.
El delantero uruguayo aún remataría su gran noche con un golazo, el tercero, al batir al portero racinguista en carrera después de una polémica caída de un rival en el forcejeo con Assunçao y otro más de cabeza a pase de Seitaridis desde la derecha.