El encuentro entre el también presidente de turno de la Unión Europea (UE) y el líder espiritual tibetano «interfiere de manera grave en los asuntos internos de China y ha herido duramente los sentimientos del pueblo chino», expuso Liu.
Asimismo, el portavoz del Ministerio de Exteriores instó a Sarkozy a «considerar seriamente las preocupaciones chinas», «adoptar una actitud adecuada» y «corregir su error».
Tras conocerse la intención de Sarkozy de entrevistarse con el Dalai Lama en un encuentro con diversos premios Nobel de la Paz en Gdnask (Polonia), el Gobierno chino decidió aplazar la cumbre UE-China que debía celebrarse en Lyon (Francia) esta semana.
Por su parte, el viceministro de Asunto Exteriores chino, He Yafei, transmitió este domingo al embajador de Francia en China, Herve Ladsous, sus protestas al respecto.
«El Gobierno chino se opone de manera firme y protesta enérgicamente por esta acción», declaró He.
«Decisión imprudente»
La prensa local tachó el encuentro de «decisión imprudente», «precipitada», y que «no sólo hiere los sentimientos del pueblo chino, sino que mina las relaciones chino-francesas».
Para los medios del país asiático, la reunión Sarkozy-Dalai Lama «ha obstruido el proceso de diálogo, cooperación e intercambio entre China y la UE».
La responsabilidad de esta «decisión desatinada» y de «la actual situación problemática en las relaciones» chino-francesas «no es de China», apuntó agencia oficial de noticias, Xinhua.
El aplazamiento de la cumbre entre China y la UE fue secundada además por gran parte de los internautas chinos, que expusieron sus opiniones a través de varios foros de internet.
Opiniones de internautas
«El asunto del Tíbet toca los intereses internos de China. Quien cruce esa línea tendrá que pagar por ello, y no es algo que ni el pueblo chino ni el francés querrían ver», escribió un internauta identificado como Qiu Jianming en un foro del sitio web «news.cn».
Otro añadió que «no es la primera vez que Francia ha usado el tema del Tíbet para interferir en los asuntos internos de China».
China invadió el Tíbet en 1950 y el Dalai Lama huyó al exilio nueve años después, tras un levantamiento frustrado contra el gobierno chino.
Desde entonces ha vivido en la India y viaja alrededor del mundo para promover su causa, mientras continúa siendo reverenciado por el pueblo tibetano y proscrito por las autoridades chinas.
Reacción de Francia
En declaraciones a la cadena de televisión pública France 2, la ministra francesa de Economía, dejó claro que el Ejecutivo galo espera que la relación con China «continúe» y que los intercambios comerciales entre los dos países no se vean afectados por ningún boicot a los productos franceses.
«Hay muchas empresas francesas establecidas en China y creo que a todos interesa que la relación continúe», pese a lo que las autoridades chinas consideran un «pequeño incidente», subrayó la ministra.
La definición de la titular de Economía francesa no coincide con la del Ministerio de Exteriores chino, cuyo portavoz, Liu Jianchao, señaló hoy en un comunicado que la reunión entre Sarkozy y el Dalai Lama supone una «grave intromisión» en los asuntos internos de China.
El encuentro «interfiere de manera grave en los asuntos internos de China y ha herido duramente los sentimientos del pueblo chino», según Liu, quien instó al jefe del Estado francés y presidente de turno de la Unión Europea (UE) a «corregir su error».