Por otra parte, el presidente del Congreso desmintió que los diputados falten al hemiciclo por «estar ociosos en el bar» y señaló que «es injusto» trasladar esa imagen a los ciudadanos. Sin embargo, admitió que es es posible que sea necesario «modificar las costumbres y el orden del pleno», para que las sesiones «tengan más relevancia política que interés técnico». «Lo voy a sugerir», adelantó.
«Hay muchos españoles de buena fe que, cuando ven el hemiciclo vacío, piensan que los diputados no son trabajadores. El diputado está en su despacho trabajando y tiene un monitor en el que sigue el pleno. Creo que hay que modificar algunas reglas para no dar esa imagen triste y penosa, que me duele», apuntó.
Sobre la discusión que generó la placa en honor de la Madre Maravillas, Bono criticó a quienes, a su juicio, «la pluma o la lengua se les fue» de las manos y «faltaron gravemente al respeto». «Me pareció que estábamos incomodando a la monja en su memoria y si tanta gente estaba en contra, pues no ponemos la placa», sentenció.