Los accionistas de Fortis exigen que se obtengan el mayor provecho de esa transacción, que en principio estaba previsto cerrarse el pasado día 4, según el Financieele Dagblad.
BNP Paribas recibió el pasado el 3 de diciembre el visto bueno de la Comisión Europea para hacerse con el control de los activos bancarios de Fortis en Bélgica y Luxemburgo y con su división de seguros belga.
Sin embargo, la CE puso como condición al grupo francés que venda su negocio de crédito al consumo en Bélgica.
BNP Paribas llegó a un acuerdo el pasado mes de octubre para comprar a los gobiernos belga y luxemburgués las actividades bancarias de Fortis en esos dos países, que previamente habían nacionalizado.
Holanda adquirió, por su parte, todas las actividades de Fortis en el país (banca y seguros, incluidos los activos de ABN Amro).
Fortis había comprado el año pasado a un rival mucho más grande, ABN Amro, junto al Santander y Royal Bank of Scotland, pero la operación le acabó saliendo mal.
A los problemas para pagar su parte de ABN (24.700 millones de euros) se sumó la exposición de la entidad a las hipotecas de alto riesgo en Estados Unidos y todo ello en un contexto de creciente tensión en los mercados financieros globales.