Montilla ha sido recibido en la multinacional por el vicepresidente senior y responsable de comunicación corporativa, Naofumi Sakai, y el presidente de Sony España, Pedro Navarrete.
En una conversación posterior con periodistas, Navarrete ha confirmado la apuesta por una «congelación salarial» ante lo que es una falta de competitividad de la planta de Viladecavalls, que fabrica televisiones.
Navarrete, que ha admitido que es «difícil» que Sony apueste a corto plazo por una línea de producción en Cataluña, ha manifestado la voluntad de la compañía de proceder a un ajuste salarial, sobre todo porque el actual convenio está por encima de lo que marca el convenio del metal de la provincia de Barcelona.
Navarrete ha puesto de ejemplo de mayor competitividad a la planta de Sony en Eslovaquia, que, como la de Viladecavalls, fabrica anualmente unos dos millones de televisiones planas, aunque tiene el doble de capacidad de producción.
La planta de Viladecavalls, que llegó a tener unos 2.000 empleados, tiene actualmente unos 1.300 fijos, de los cuales podrían ser despedidos unos 275 si la compañía no acomete una serie de ajustes, como la congelación salarial de la plantilla.
Precisamente, los sindicatos han convocado una manifestación el próximo sábado para reclamar a Sony un plan de viabilidad.
Montilla ha explicado que, en este momento de crisis global del consumo, ha querido expresar a Sony su «disposición a continuar colaborando con la empresa, en la medida que haya perspectivas también de garantizar el futuro de la misma».
«Ahora más que nunca hay que estar encima de las empresas, especialmente cuando padecen, como es este caso y muchos otros, bajadas muy importante de sus ventas fruto de la caída de consumo», ha subrayado.