El entrenador manchego no quiso hacer concesiones al Zenit y sólo reservó a Casillas de entre los habituales intentando comenzar con buen pie su periplo como técnico madridista.
En un gélido ambiente ante sólo veinticinco mil espectadores, dos mil de ellos rusos, el equipo blanco comenzó con Gago como mediocentro flanqueado por Guti y Van der Vaart y con Higuaín en punta con Robben y Raúl a su lado. Los dos holandeses, muy abiertos, confirmaron cuál va a ser una de las claves en el sistema del manchego: otorgarle más importancia a los extremos que su predecesor.
Ese planteamiento y sus constantes indicaciones desde el banquillo para que la línea defensiva y la de medular achicaran espacios al mismo tiempo y no se desordenaran fueron las primeras pistas para desvelar los preceptos del nuevo Real Madrid, que imprimió un fuerte ritmo de inicio.
El Zenit, encerrado atrás desde los primeros compases y fuera de forma una vez finalizada la Liga rusa, dista mucho del equipo que maravilló la pasada temporada conquistando la copa de la UEFA y desbordando al Manchester en la Supercopa continental. Ayer, su planteamiento inicial era el de defender los dominios de Malafeev y otorgarle a Arshavin toda la responsabilidad en ataque.
Un lanzamiento de Van der Vaart que salió fuera y dos disparos de Higuaín, uno rechazado por un defensa y otro despejado por el portero ruso, fueron el preludio del primer gol del partido, que llegó en el ecuador del primer parcial gracias a un garrafal error del Malafeev. El cancerbero intentó atajar sólo con su mano derecha un centro de Van der Vaart desde la izquierda, dejó el balón suelto en el área y Raúl, siempre atento, no perdonó. El capitán madridista ha perdido en los últimos años velocidad y algo de confianza, pero mantiene su picardía y la fe que le convirtió en el único jugador sobre el césped en prever el posible error del portero del Zenit.
Desde entonces, el equipo ruso adelantó lineas y Danny y Pogrebnyak dieron más presencia al ataque, poniendo permanentemente en apuros a Salgado en su banda y poniendo nerviosa en numerosas acciones a la defensa que Juande ha calificado como la mejor de Europa.
Hasta el descanso el Real Madrid sólo pudo ampliar su ventaja en las botas de Robben. El holandés, el mejor de su equipo en la primera parte al cambiarse constantemente de banda y desbordar a los defensas del Zenit sin miedo alguno a sus posibles entradas, perdonó en el minuto 34 a Malafeev, quien logró despejar en su estirada un disparo del centrocampista a la altura del punto de penalti.
Pruebas tras el descanso
En la reanudación llegaron varias sorpresas. Advocaat sustituyó a Arshavin por Fayzulin y privó a una de las estrellas de la pasado Eurocopa de la oportunidad de reivindicarse ante Juande Ramos de cara al mercado invernal.
El ciudadrealeño, por su parte, ensayó con Metzelder como lateral derecho, dando entrada al alemán por Van der Vaart, adelantando a Marcelo y situando a Salgado en el lateral izquierdo. No se pudieron sacar muchas conclusiones, porque el partido se rompió pronto. Sergio Ramos y Robben perdonaron pero el holandés aprovechó la segunda opción que tuvo tras la reanudación y lo hizo con una preciosa vaselina cuando estuvo frente a frente con el cancerbero tras un pase de Raúl.
Como el holandés había marcado con una de las especialidades del capitán madridista, Raúl no quiso ser menos y selló a continuación el tercer gol con una cuchara y convirtió en un trámite la última media hora del encuentro.
El Zenit intentó estrenarse, pero el disparo de Fayzulin se estrelló en el larguero tras ser rechazado por Dudek. La inclusión de Javi García en sustitución de Guti y la de Saviola por Raúl permitieron a Juande Ramos disfrutar plácidamente de los últimos minutos del partido de su estreno y desviar su pensamiento hacia el ‘clásico’ del sábado. El larguero volvió a evitar un gol del Zenit, esta vez tras cabezazo de Danny, pero el Real Madrid no pasó por más apuros para mantener un cómodo triunfo.
Real Madrid 3-0 Zenit
Dudek, Michel Salgado, Sergio Ramos, Cannavaro, Marcelo, Gago, Guti (Javi García, m.51), Van der Vaart (Metzelder, m.46), Robben, Raúl (Saviola, m.60) e Higuaín.
Malafeev, Anyukov, Lombaerts (Domínguez, m.76), Krizanac, Sirl, Tymoshchuk, Denisov, Zyryanov, Danny, Arshavin (Faizulyn, m.46) y Pogrebnyak (Tekke, m.72).
1-0, m.25: Raúl; 2-0, m.50: Robben; 3-0, m.58.
Jonas Eriksson (SWE). Mostró tarjeta amarilla a Danny (m.63) y Sirl (m.83)
encuentro correspondiente a la sexta y última jornada del Grupo H de la fase de Grupos de la Liga de Campeones disputado en el estadio Santiago Bernabeu ante unos 50.000 espectadores.