El informe ha sido examinado por los jefes veterinarios de la UE, que han aprovechado una reunión rutinaria para hablar sobre la detección de las dioxinas, en los últimos días, en explotaciones de porcino y de vacuno de Irlanda.
«La opinión de la AESA es tranquilizadora, porque confirma que no ha habido riesgo para los ciudadanos de la UE por el consumo de la carne de cerdo presuntamente contaminada durante el período que nos preocupa (desde septiembre)», según ha declarado la portavoz comunitaria de Sanidad, Nina Papadoulaki.
Septiembre fue el mes en el que los piensos que ha comido el ganado contaminado empezaron a registrar más contenido en dioxinas.
El origen de este problema está en una empresa que reciclaba desechos de panadería para usarlos como sustento animal.
La portavoz ha remarcado, en cualquier caso, que «sólo un 6 ó 7% de la carne de cerdo producida en Irlanda ha estado afectada por la contaminación». «En el peor de los casos, si una persona comiera carne contaminada cada día durante tres meses esto no provocaría efectos dañinos para la salud», ha subrayado.
La portavoz de Sanidad ha insistido en que, aunque no haya peligro, Irlanda ha tomado «las medidas adecuadas porque es necesario evitar cualquier exposición a la contaminación por dioxinas».
Según los datos que se conocen hasta el momento, los piensos con exceso de dioxinas se han suministrado a 10 granjas de cerdos y 28 de vacuno de Irlanda, así como a nueve de porcino de Irlanda del Norte.
Envío de carne a 22 países
Irlanda envió carne de porcino que podría estar afectada por la contaminación a 22 países del mundo, 13 de ellos comunitarios, entre los que no figura España.
La CE está ahora a la espera de los análisis sobre la contaminación de vacuno de Irlanda con dioxinas, que hasta ahora se ha detectado en tres explotaciones.
Desde Bruselas se ha informado de que por el momento no se puede ordenar a los países que retiren el vacuno de Irlanda del mercado, antes de saber si los análisis confirman que desde septiembre se exportaron o no partidas de carne de animales infectados con esas sustancias.
Según la portavoz, si se comprueba que ha salido carne de esas tres explotaciones a otros estados comunitarios o a países terceros, la CE informará por el «sistema de alerta rápida», mediante el cual Bruselas comunica a los Veintisiete cuando en un punto de la UE hay un problema de seguridad alimentaria.
«Si tenemos ese escenario, los países tendrán que retirar los productos del mercado, pero estamos pendientes de los análisis del laboratorio y no hay que exagerar», ha remarcado Papadoulaki.
En general, Bruselas recalca que no hay peligro para los ciudadanos y que en el caso de la ternera es aún inferior al del cerdo, pues en la dieta del ganado vacuno hay menos proporción de los piensos con exceso de dioxinas.