La ministra de Economía y Finanzas, Christine Lagarde, explicó en un comunicado que va a comprar títulos por valor de 3.000 millones de Crédit Agricole; 2.550 millones de BNP Paribas; 1.700 millones de Société Générale; 1.200 millones de Crédit Mutuel; 1.100 millones de Caisse d’Epargne, y 950 millones de Banques Populaires.
Lagarde subrayó que «en contrapartida» esas entidades «se han comprometido con objetivos de progresión» del volumen de créditos «para financiar las necesidades de los particulares, de las empresas y de las administraciones territoriales». Precisó que, a ese efecto, cada banco a firmado una convención.
La operación se enmarca en el plan gubernamental para «garantizar la financiación de las instituciones financieras sólidas aportándoles recursos en efectivo y en capital necesarios para que mantengan una actividad importante de crédito a la economía».