Un partido que resultó bastante equilibrado con dos tiempos un tanto extraños, pues en la primera media hora las húngaras dominaron y se fueron al descanso con dos tantos de diferencia (12-10); mientras que las españolas cogieron la batuta del encuentro en la continuación al igualar a 13 y luego ir siempre por delante en el tanteador.
Las españolas perdieron el rumbo en la primera mitad y dio la impresión de que todavía no estaban recuperadas del varapalo que supuso la derrota ante Dinamarca (26-23).
Cometieron numerosos errores tanto en defensa como en ataque como lo demuestra el hecho de que siempre fueron a remolque en el marcador para agotar esa media hora con un incierto 12-10.
En la continuación, el técnico español Jorge Dueñas cambió la táctica del equipo pasando de un 6-0 a un 5-1 que poco a poco le fue dando resultados al desconcertar a la húngaras.
En los primeros cinco minutos, lograron igualar a trece y, a partir de ahí, siempre fueron por delante, llegando a tener como renta máxima tres tantos en algunas fases del tramo final del partido.
Tras este resultado, España depende de que la actual campeona olímpica, Noruega, derrote a Rumanía. En el peor de los casos, España luchará por el quinto puesto, el sábado.
España 23-21 Hungría
Cristina y Ciubanu, Garmendia (3, 1p), Carmen Martín (1), Andrea, Beatriz Fernández (1), Cuadrado (1), Mangué (7, 2p), Macarena (4), Alonso (3), Pinedo (1), Begoña Fernández (1), Oncina (1) y Koleva.
Pastrovisch y Palinger, Balogh , Vérten (4), Szucsanszki, Vincze (1), Bulath (2), Gorbicz (4, 1p), Szamoransky, (2), Sopronyi (1); Bodi (1), Szucs (3), Hornyak (1) y Kovacsicz (2).
1-3, 4-7, 6-8, 7-11, 9-11 y 10-12 -descanso-, 14-13, 17-15, 18-16, 19-17, 20-19 y 23-21.
Brunovsky y Canda (eslovacos). Excluyeron a Mangué y Macarena, Varten, Bulath, Szamoransky y Szucs.
Partido disputado en el pabellón de Ohrid ante unos mil espectadores.