Se trata de la tercera película de David Trueba, tras La buena vida y Obra maestra, bastante fiel a la novela aunque el protagonista se convierte en el filme en mujer, interpretada por Ariadna Gil, compañera sentimental del director.
Una novelista que ha abandonado su carrera de escritora rastrea una historia real ocurrida en los últimos días de la guerra civil española: el escritor falangista Rafael Sánchez Mazas fue fusilado junto a otros cincuenta prisioneros, pero consiguió huir por el bosque y esconderse bajo la lluvia.
Al parecer, un soldado que vigilaba la zona lo encontró y lo dejó escapar, así que la escritora decide recomponer las piezas de esta historia, plagada de contradicciones y personajes enigmáticos.