El documental, que se emitirá el próximo 3 de marzo en la cadena franco-alemana «ARTE», es obra de los directores Antoine Vitkine y Taly Jaoui. Los autores se sirven del recurso del «flashback» para relatar cómo Dati -cuando tenía 27 años- fue obligada a casarse con un hombre al que no quería, su lucha por conseguir la anulación del matrimonio y su exilio a Londres, así como su labor de mediadora en las protestas por ley contra el velo islámico en las escuelas.
En esta tarea de investigación, que comenzó el día que la eligieron como ministra, los realizadores han viajado a los lugares de la infancia de Dati y han entrevistado a amigos, profesores, personalidades políticas y periodistas.
Se narra la trayectoria de esta magistrada y licenciada en Economía, que hace poco más de un mes alumbró una niña llamada Zohra, cuya paternidad no ha querido revelar públicamente.
La red de Rachida
El recorrido político de Dati, de 43 años, se sustenta en buena parte en su habilidad para tejer una nutrida red de contactos que la llevaron a liderar la Justicia gala tras encomendarse al propio Sarkozy, figura que «fascina» a esta hija de albañil porque dice se siente «reflejada» en la evolución del presidente.
No en vano, esta mujer hecha a sí misma pasaba las noches de su adolescencia hojeando el «Quién es quién» y recortando periódicos para inspirarse en ejemplos de personas salidas de la nada.
Los directores de «Dati, la ambiciosa» no obvian en su trabajo que la carrera de la ministra está llena de luces y sombras. En junio abandonará el Ministerio de Justicia para ser candidata -contra sus deseos- a un escaño en el Parlamento Europeo, siguiendo las instrucciones de Sarkozy, después de que sus deslices profesionales y su muy publicada vida personal hayan empañado la imagen de una de las mujeres que más brilló con la llegada al poder del presidente de Francia.