Sin embargo, posteriormente pudo comprobarse que la deflagración se debió al lanzamiento del cohete desde el territorio libanés.
Por su parte, fuentes militares libanesas indicaron que dos proyectiles fueron disparados desde la región meridional libanesa de Nakura y que uno de ellos alcanzó territorio israelí, mientras que el segundo impactó en suelo libanés.
Las fuentes explicaron que tras ese lanzamiento el Ejército israelí respondió con el disparo de tres obuses de artillería contra la zona de Kraile, en la región de Tiro, en el sur de Líbano.