La FIA rechazó la propuesta de la FOTA de cambiar el sistema de puntuación (12-9-7-5-4-3-2-1 en lugar de los actuales 10-8-6-5-4-3-2-1), y anunció que en el 2009 el campeonato se decidirá en favor del piloto que tenga un mayor número de victorias.
Asimismo, la FIA aprobó también fijar un tope al presupuesto de cada escudería por temporada, que fue fijado en 30 millones de libras esterlinas, cifra en la que se incluyen los sueldos de los pilotos.
«En referencia a la decisiones adoptadas hoy por el Consejo Mundial de la FIA, la FOTA desea expresar su decepción y preocupación por el hecho de que se haya actuado de una forma unilateral», señala la asociación.
La FOTA considera que con las nuevas reglas «se corre el riesgo de ir en perjuicio de la esencia la Fórmula Uno y de los principios que hacen de éste uno de los deportes más populares».
Los equipos consideran que «es necesario estudiar a fondo la nueva situación y hacer todo lo posible para mantener un reglamento estable exento de continuas modificaciones que confundan a los constructores, equipos, público y patrocinadores».