Otras cinco personas, entre ellas una mujer, continúan siendo interrogadas por la PSNI en relación con la muerte de Carroll, católico de 48 años, mientras que cuatro sospechosos también permanecen detenidos por su supuesta implicación en el asesinato, dos días antes, de dos soldados británicos.
Entre éstos últimos figura el norirlandés Colin Duffy, un ex miembro del IRA de 41 años, conocido militante republicano y ahora supuestamente vinculado al IRA Auténtico, la escisión responsable de la muerte de los dos soldados en la base militar de Massereene, al norte de Belfast.
En los años 90, Duffy fue acusado del asesinato de un soldado y de dos policías, pero nunca llegó a ser procesado, en la primera ocasión porque el principal testigo era un miembro de los grupos paramilitares unionistas y en la segunda por defecto de forma.
La representante legal de Duffy, Rosemary Nelson, recibió numerosas amenazas por defenderle ante la Justicia y en 1999 murió por la explosión de un coche bomba que los grupos unionistas habían aparcado enfrente de su casa.