Con una contracción del 6,3%, la mayor economía del mundo sufrió a finales del año pasado el peor comportamiento en un trimestre del último cuarto de siglo.
Sin embargo, el dato fue mejor que lo esperado por la mayoría de los analistas, que habían calculado que la contracción del PIB en el cuarto trimestre sería del 6,7%.
Entre octubre y diciembre del 2008 las ganancias de las empresas se redujeron un 16,5%, la mayor disminución desde 1953, y la demanda interna de EEUU bajó a un ritmo anual del 5,8%, la mayor caída desde 1980.
Desde que comenzó la recesión en diciembre del 2007, la economía de EEUU ha perdido unos 4,5 millones de empleos, más de 1,2 millones de ellos en lo que va de este año.
En términos nominales las ganancias de las empresas, ajustadas por el valor de sus inventarios y la depreciación de sus gastos de capital, disminuyeron en 250.300 millones de dólares, la mayor caída desde que en 1947 se inició la compilación de este dato.
El gasto de los consumidores, que representa casi el 70% de la actividad económica de EEUU, bajó a un ritmo anual del 4,3% en el último trimestre del año pasado. Fue la primera vez, también desde 1947, con tres trimestres consecutivos en los cuales el gasto de los consumidores se contrajo más de un 3%.