Montoro señaló que en estos meses la evolución del desempleo está ligada a la estacionalidad, en verano hay más empleo en los servicios y en la construcción, y aseguró, aludiendo a datos del Ministerio de Economía y Hacienda, que si se restara el efecto calendario a los datos de mayo el paro habría aumentado en ese mes en 90.000 personas.
Además, recordó que en la crisis de 1993 ocurrió lo mismo en el mes de mayo, en el que el paro cayó en cifras parecidas, lo que no impidió que se destruyeran más de un millón de empleos en el tiempo en el que duró la crisis.
Montoro consideró que «no se puede hacer una valoración positiva» de los datos conocidos hoy y criticó la actitud del Gobierno, que «sólo mira al 7 de junio», día de las elecciones europeas, y en este momento de campaña se dedica a hablar de «brotes verdes» y de salidas de la crisis.
Insistió en que el «diferencial» de la crisis en España es su elevado desempleo, así como la destrucción de las pequeñas empresas, que se sigue plasmando en los datos de afiliación de autónomos, que ha descendido en mayo 6.561 trabajadores por cuenta propia, y atribuyó este problema a la bajada del crédito bancario a las familias, las pymes y los autónomos.
«El crédito sigue sin llegar a quien más lo necesita y mientras no llegue el crédito bancario, mientras no consigamos arreglar las tuberías» del sistema financiero «no veremos una recuperación económica», señaló el portavoz popular.
En este sentido, Montoro se mostró convencido de que en cuanto pasen las elecciones europeas el Gobierno buscará al PP para negociar nuevas medidas para el sistema financiero y un fondo de rescate para la banca.
Tras el 7 de junio, continuó, el Ejecutivo «se tendrá que arremangar para sanear las entidades financieras, poniendo otra vez muchísimo dinero público» como el que «ya se ha puesto y no ha llegado a empresas y autónomos».
«Ahora no nos dicen nada y la semana que viene sonará el teléfono, y seremos responsables», señaló Montoro, quien advirtió de que el PP condicionará cualquier apoyo a que el «arreglo de tuberías» de la banca llegue a las pequeñas empresas, los autónomos y las familias.
Montoro se mostró convencido de que el Gobierno pedirá al PP su apoyo y apelará a su responsabilidad como primer partido de la oposición. «Sonarán las cornetas de la responsabilidad» y su partido estará ahí para «sostener las columnas del templo», añadió.
En cualquier caso, advirtió de que «cuanto más tiempo pasa» con el Gobierno «diciendo que no pasa nada y que hay más brotes verdes hay peor es el problema y más dinero público habrá que echar para rellenar el agujero».