Los Veintisiete respaldaron la última propuesta presentada por Bruselas para prolongar un tipo de ayuda, la concedida a través de la intervención o compra pública de determinados lácteos (leche en polvo y mantequilla), con el fin de apartar excedentes.
Sin embargo, España y los dos principales productores de leche comunitarios, Francia y Alemania, insistieron en que esta medida es insuficiente y reclamaron más acciones de la UE para solucionar la crisis.
Entre tanto y en Galicia, centenares de ganaderos con sus tractores iniciaron una semana de movilización para protestar por la grave situación del sector; en Estrasburgo (Francia) productores de 11 países se concentrarán mañana ante el Parlamento Europeo para pedir que la UE cambie sus políticas y les ayude a tener una renta digna.
La propuesta debatida en el Consejo de Agricultura de la UE consiste en prolongar por lo menos hasta finales de febrero del 2010 la intervención de mantequilla y de leche en polvo, vigente hasta el 31 de agosto; Bruselas plantea que incluso si el mercado evoluciona mal continúe tal ayuda hasta el 2011.
Todos los países, excepto el Reino Unido y Dinamarca, respaldaron dicha prórroga, con lo cual solamente hace falta la opinión de la Eurocámara para su ratificación, lo que ocurrirá previsiblemente en octubre.
La CE propiciará los cambios legales necesarios ante el Comité de Gestión de la UE, formado por expertos de los Veintisiete, para que no se interrumpa la intervención entre agosto y octubre.
Pero la ministra española del Medio Ambiente y Medio Rural, Elena Espinosa, ha dicho que esta actuación «no es suficiente» y ha reclamado «más medidas» para solucionar los problemas de los ganaderos y los bajos precios de la leche.
España y Francia han pedido que en el mercado lácteo se apliquen los recientes acuerdos del «grupo de alto nivel de la UE sobre la competitividad del sector agroalimentario» que aluden a un mayor control de la «transparencia de los precios» y de los contratos entre productores y distribuidores.
Asimismo, España ha abogado por estudiar modificaciones en las referencias sobre los precios y los volúmenes de productos sometidos a retiradas.
Espinosa propone también la venta a terceros países o para alimentación animal de algunos volúmenes de lácteos almacenados para no dar la sensación de que el producto «ejerce una presión psicológica» sobre el mercado.
En general, los países están a la espera del informe que presentará el próximo día 22 la comisaria europea de Agricultura, Mariann Fischer Boel, con un análisis del mercado lácteo e ideas para tratar de mejorarlo.
Fischer Boel ha manifestado que dentro de las ayudas de mercado «se han aplicado ya casi todos los instrumentos disponibles dentro de la red de seguridad de la UE». La comisaria ha indicado que espera que a medio y largo plazo aumente la demanda de leche y los precios se estabilicen.
Sin embargo, Espinosa ha declarado que hay que ver por qué las medidas no funcionan para restablecer los precios y estudiar si existen «distorsiones»; como ejemplo contrario, ha citado las cotizaciones del aceite de oliva, que con actuaciones más moderadas de la UE se han recuperado.