Así, el coste de que los empresarios dejasen de pagar dos puntos de sus cotizaciones ascendería a 7.200 millones, mientras que los doce meses de cobertura supondrían 906 millones.
En el primer borrador, el Gobierno defendía que la rebaja de cotizaciones fuera de medio punto, mientras que el cobro de los 420 euros lo reducía a seis meses.
De acuerdo con las estimaciones hechas por el ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, cada punto que deja de cobrar la Seguridad Social supone 3.600 millones.
Esta argumentación es la que ha llevado al Gobierno a rechazar categóricamente la demanda de cinco puntos de rebaja de la patronal. Según Corbacho, si se aplicase una recorte de cinco puntos, la Seguridad Social dejaría de ingresar 18.000 millones y entraría en déficit.
Respecto al coste de la protección de los desempleados, en el primer borrador se cifraba para un período de seis meses en 453 millones de euros entre octubre de este año y marzo del 2010 para un colectivo de 200.000 beneficiarios.
El Gobierno no quiere que esa protección suponga la creación de un nuevo subsidio de carácter permanente, algo en lo que coincide la CEOE.
Con las dos nuevas propuestas conocidas ayer, el Gobierno intenta convencer a la CEOE y a los sindicatos de la bondad del acuerdo y así firmarlo antes de que acabe julio, el 29 de julio se firmó en La Moncloa la hoja de ruta del Diálogo Social para esta nueva legislatura.