Un grupo de alto nivel integrado por los Veintisiete miembros de la UE hizo este viernes un balance de la situación política en Honduras, y reafirmó su decisión de limitar sus contactos diplomáticos con el nuevo Gobierno hondureño.
Además, precisó que cada país de la UE, por su parte, «podrá tomar las medidas que estime necesarias», indicaron a Efe fuentes comunitarias. Las fuentes insistieron en que «los contactos (con el Gobierno de facto) serán extremadamente restringidos» y agregaron que la Unión «no excluye tomar medidas suplementarias en el futuro».
La UE ya anunció su intención de recortar sus contactos con el Gobierno provisional de Honduras el pasado día 21, cuando también llamó a las partes a «evitar cualquier acción que pueda desembocar en incrementar la tensión y la violencia».
«Recrudecer» las medidas
El viernes, los países europeos volvieron a mostrar un «apoyo muy fuerte» a los esfuerzos de mediación del presidente costarricense, Óscar Arias, en el conflicto entre el presidente depuesto de Honduras, Manuel Zelaya, y el actual gobernante, Roberto Micheletti. El derrocado mandatario hondureño pidió el viernes a la comunidad internacional «recrudecer» sus medidas contra los golpistas.
«Lo que está pasando en Honduras (tras el golpe de Estado del pasado 28 de junio) es una burla para el propio Estados Unidos. Es un reto y un desafío para la comunidad internacional», indicó. Asimismo, exigió a organizaciones como la UE, la ONU o la Organización de Estados Americanos (OEA) hacer valer el derecho internacional público.