El Real Madrid fue «sin duda el más exigente porque los seguidores quieren siempre ganar y, al mismo tiempo, ver fútbol: están habituados al buen fútbol desde Di Stéfano», manifestó el ex futbolista en entrevista que publica el rotativo luso Diario económico.
Además, Figo recordó que el momento más importante de su carrera fue su primer contrato con el Sporting de Lisboa, entidad donde se dio a conocer y desde la que fue traspasado al Barça en 1995.
El Balón de Oro de 2000, que se retiró la última temporada del fútbol profesional al servicio del Inter de Milán, confirmó que continuará ligado al campeón italiano los próximos dos años «en el área de relaciones internacionales», a pesar de tener su residencia fijada en Madrid.
Figo, uno de los mejores deportistas de la historia de Portugal, dejó claro que no vive del estrellato, sino de lo que produjo en términos profesionales en sus 20 años como jugador.
Confesó que, por el momento, no echa de menos la competición porque no vive «24 horas pensando en fútbol» y explicó que se ha preparado durante los últimos años para «no depender del fútbol», ni sentirse «obligado a seguir una carrera como entrenador o dirigente de un club».