Después de tantas jornadas esperando a que el S&P superara la resistencia de los 1.020 puntos y que el Ibex 35 atravesara la frontera de los 11.000 enteros, el agotamiento ha hecho presencia en el parqué y ha llegado la hora de la corrección.
Todas las plazas bursátiles han optado por la recogida de beneficios después de que el viernes se conociera que la confianza del consumidor de la Universidad de Michigan era peor de lo esperado. Tampoco ha ayudado mucho la quiebra de Colonial Bank of Montgomery en Estados Unidos, que ha hecho temblar los aún débiles cimientos del sector bancario.
También mostraron importantes números rojos el resto de parqués europeos, ya que París se desplomaba el 2,16%, en tanto que Fráncfort se dejaba el 2,02% y Londres, el 1,46%.
La recogida de beneficios se impuso desde el principio pese a los buenos datos macroeconómicos conocidos, como la recuperación de la economía japonesa, que volvió a registrar crecimientos tras cinco trimestres consecutivos de descensos, o la balanza comercial europea, que resultó mejor de lo esperado.
Las pérdidas se habían sembrado ya de madrugada en los mercados asiáticos, donde el Nikkei cayó un 3,10%, y se terminaron por consolidar con la apertura bajista del principal mercado del mundo, Wall Street, que cedía el 1,78% al cierre de los mercados en el Viejo Continente, pese al dato mejor de lo esperado del índice de manufacturas de Nueva York.
Las constructoras y las entidades financieras fueron los valores más perjudicados de la bolsa española, con caídas superiores a la media del selectivo, donde sólo una empresa, Grifols, logró salvarse de la quema.
La compañía más bajista del indicador y de la bolsas, tanto del selectivo como del mercado contínuo, fue OHL, que se desplomó el 7,10%; seguida por Sacyr Vallehermoso, con el 4,37%, y por el Popular, con el 4,07%.
Además de la entidad financiera presidida por Ángel Ron, el BBVA también registró una importante caída, del 3,71%; seguida del Sabadell, con el 3,67%, y del Santander, con el 3,15%.
Entre el resto de pesos pesados del selectivo español también se impusieron las pérdidas, ya que Telefónica cedió el 2,88%, en tanto que Repsol se dejó el 2,54% e Iberdrola, el 1,90%.
En cambio, las inmobiliarias capitanearon las subidas del mercado continuo, con Reyal Urbis a la cabeza tras dispararse el 67,38%, seguida de Afirma, con el 26,10%; Inmobiliaria Colonial, con el 24%; Metrovacesa, con el 18,25%; Urbas, con el 13,79%; Inbesos, con el 13,64%; Realia, con el 9,87%, y AISA, con el 6,51%.
El mercado madrileño registró una caída similar al Ibex, al descender el 2,78%, con servicios financieros e inmobiliarios y tecnología y comunicaciones como sectores más bajistas, con un retroceso del 3,04 y del 2,83%, respectivamente.
Por su parte, en el mercado de divisas, el euro se intercambiaba al cierre de los mercados en el Viejo Continente a 1,408 dólares y a 132,9 yenes.