La recomendación busca un «enfoque compartido» de las campañas de vacunación que se pondrán en marcha el próximo otoño en los diferentes estados miembros. Los Veintisiete han identificado como grupo prioritario a «todas las personas con más de 6 meses de edad que padezcan enfermedades crónicas (como enfermedades respiratorias, cardiovasculares o con algún tipo de inmunodeficiencia), comenzando por aquellos que tengan síntomas más graves».
Los otros dos grupos prioritarios son las mujeres embarazadas y los trabajadores del sector sanitario. Una vez se haya procedido a la vacunación de estos colectivos, las autoridades sanitarias nacionales podrán continuar aplicando las vacunas al resto de la población «hasta alcanzar los objetivos fijados por cada país», según consta en el documento acordado por los Veintisiete.
El Comité recalcó que el desarrollo de una estrategia de vacunación «es responsabilidad y mandato» de cada Estado miembro. Así, cada país establecerá sus propios grupos de población a los que considere necesario aplicar la vacuna, que en algunos casos «podrían suponer la totalidad de la población del país, y en otros, grupos específicos».
«Grupos prioritarios»
No obstante, el Comité destaca la necesidad de definir los «grupos prioritarios», ya que «no es probable que la vacuna esté inmediatamente disponible para todos los grupos y al mismo tiempo». Los Veintisiete alcanzaron hoy una posición común sobre la recomendación tras modificar el texto en varias ocasiones desde la semana pasada debido a divergencias acerca de ciertos puntos del mismo, según dijeron a Efe fuentes comunitarias.